Fundado en 1910
Menú
Cerrar

El hasta ahora líder de Syriza, Estéfanos KaselakisEFE

Syriza, el Podemos griego, descabezado «por las puñaladas internas»

Hasta quitar a su presidente, Estéfanos Kasekalis, hubo «primarias ilegítimas, mociones ilegales y escisiones histriónicas», según fuentes del propio partido heleno

Una moción de censura, por sorpresa y promovida por los altos cargos del partido, ha hecho caer a Estéfanos Kaselakis, que llevaba presidiendo Syriza apenas un año.

La propia formación de izquierdas ha declarado que en la afrenta por el poder hubo acciones malintencionadas por doquier: «Golpes internos, puñaladas a compañeros, primarias ilegítimas, mociones ilegales y escisiones histriónicas».

Un coctel molotov de la segunda fuerza en el Parlamento heleno, que otrora fuera sucesora del anterior primer ministro griego, Alexis Tsipras, que ha quedado descabezada de un líder y en sus horas más bajas tras todos los escándalos.

Mientras Kaselakis reacciona a la batalla política, admite los problemas y ruega templanza: «Estamos viendo unas provocaciones increíbles. Hay comentarios y declaraciones falsas en la prensa. Ante la división pido compostura, paciencia y autocontrol. Son nuestra mejor arma. Convertid vuestro enfado en una creación. Estoy aquí», sentenció.

Quizás el pasado de Kaselakis como alto ejecutivo en Goldman Sachs y que hable mejor inglés que griego, unido a su nula experiencia en la escena política griega le haya jugado una mala pasada. Un outsider que se presentó sin programa y con un puñado de firmas.

Aunque, no acabarán tan fácil con Estéfanos que amenaza crear su propio partido o presentarse a las próximas primarias.

Según la gran mayoría de las encuestas, la formación izquierdista ya es la tercera fuerza electoral griega, por detrás de Nueva Democracia (partido de centroderecha) y del partido socialdemócrata Pasok.

La historia de una caída anunciada

Las elecciones europeas tuvieron un claro vencedor, el primer ministro conservador Kyriakos Mitsotakis que lideró aglutinando el 32 % de los votos. Por detrás, se situaba a distancia, pero en un discreto segundo puesto, Syriza que le llevaba a la irrelevancia.

El considerado Podemos griego, con el que comparte raíces y programa, fue votado por el 18 % del electorado, a ocho puntos de el partido socialista Pasok.

Peor fue la debacle sufrida en las elecciones locales y regionales en la Grecia de 2019, cuando se hundió Syriza. El partido del primer ministro, Alexis Tsipras, tildado de extrema izquierda. Ya que no se presagiaba la catástrofe en la que fue barrido del mapa regional griego.

Tsipras aguantó hasta su dimisión, en junio de 2023, renunciando al cargo de presidente del partido, entretanto prometía no volver a ser candidato en ninguna elección.

Syriza guarda inquietantes similitudes con sus camaradas de Podemos. Ya que Tsipras se hizo cargo del partido el 8 de octubre de 2009, cuatro días después de unas elecciones generales en las que el partido apenas logró el 4,6% de los votos. A partir de ahí comenzó una galopante carrera ascendente que concluyó con el acceso al Gobierno griego, en enero de 2015, reuniendo el 36,3% de los votos.

Tras la firma del tercer rescate, Tsipras dimitió como primer ministro y convocó elecciones. Entonces, tuvo que afrontar la peor crisis interna de su partido.

El primer ministro heleno ofreció una entrevista para The Guardian tildando el nombramiento del controvertido Yanis Varoufakis, el ministro de Economía, como «la elección correcta para una estrategia inicial de 'política de choque'».

Sin embargo, Tsipras describe el plan presentado por Varoufakis, en caso de que Grecia se hubiese visto obligado a tomar la dramática decisión de poner una nueva moneda en circulación, como «tan confuso, que ni siquiera merecía la pena discutirlo». Una vez más, las puñaladas por la espalda volaban en una formación que se desinfla.