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Edmundo González, entre Delcy y Jorge Rodríguez, en la Embajada de España en CaracasRRSS

El Debate adelantó el chantaje del régimen de Maduro a Edmundo González para permitir su salida de Venezuela

El pasado 8 de septiembre, este periódico desveló la maniobra de la dictadura de Maduro que acabó con el exilio en España del presidente electo del país sudamericano

El líder opositor y presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, se vio obligado, este miércoles a reconocer, a través de un vídeo colgado en su red social de X, antes Twitter, que fue coaccionado por los hermanos Delcy y Jorge Rodríguez –figuras fuertes del régimen chavista–, para firmar un documento donde aceptaba la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) que días antes validó el fraude electoral de Nicolás Maduro, tal y como adelantó en exclusiva El Debate, el pasado día 8 de septiembre.

En la información publicada por este medio, el mismo día en el que saltó la noticia de que González Urrutia volaba en un avión de las Fuerzas Armadas españoles para exiliarse a nuestro país, fuentes involucradas en el proceso de negociación, aseguraron que además de tener que reconocer la victoria del autócrata, el exdiplomático tuvo que asegurar que no seguiría en política. Esta noticia ha sido ahora confirmada por el protagonista.

«Me dirijo a ustedes para informarles toda la verdad de lo que ocurrió con mi salida de Venezuela, el régimen pretende que todos los venezolanos perdamos la esperanza. Estando en la residencia del embajador de España, (los hermanos Rodríguez) se presentaron con un documento que debía de refrendar para permitir mi salida del país. En otras palabras: o firmaba o me atenía a las consecuencias. Hubo horas muy tensas de presión, chantaje y presiones», relató el líder de la oposición en un comunicado.

Las explicaciones de González Urrutia tuvieron lugar horas después de que el presidente de la Asamblea Nacional chavista, Jorge Rodríguez, mostrara una «carta firmada» por el exdiplomático en la que dice acatar la decisión del TSJ. «En esos momentos consideré que podía ser más útil libre que encerrado e imposibilitado de cumplir con las tareas encomendadas por el soberano. Un documento producido bajo coacción está viciado de nulidad absoluta por un vicio grave en el consentimiento», denunció el líder opositor.

Edmundo González, entre Delcy y Jorge Rodríguez, en la Embajada de España en Caracas

A renglón seguido, González Urrutia prometió continuar la lucha «hasta el final». Este caso salpica de lleno al Gobierno español, ya que todo el proceso de coacción tuvo lugar en la propia residencia del embajador de España, con la presencia del diplomático Ramón Santos y el exdiputado Eudoro González, cercano a José Luis Rodríguez Zapatero, quien jugó un papel «clave» en el exilio del presidente electo de Venezuela. De hecho, se han publicado varios vídeos en redes sociales donde se distingue a Santos acompañando a González Urrutia al avión de las Fuerza Armadas españoles para abandonar su país, una vez consentido el chantaje del régimen chavista.

El principal partido de la oposición, el Partido Popular, en boca de su vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, ha acusado al Gobierno de Sánchez de estar implicado en una operación para convertir a Maduro en un «dictador por tiempo indeterminado» al haber sido «cómplice» del «chantaje» al candidato opositor González Urrutia. Pons ha expresado su «asco» y «vergüenza» por la «complicidad del Gobierno de España» y de la representación española en Venezuela, durante una entrevista en EsRadio.

Asimismo, un grupo de opositores venezolanos residentes en España ha interpuesto una querella en la Audiencia Nacional contra el expresidente Zapatero por los delitos de lesa humanidad, tortura y contra la integridad moral en Venezuela. A todo esto hay que sumar que el régimen chavista mantiene como rehenes a dos turistas vascos, a los que acusa de intentar derrocar a Maduro, pero que, como apunta el líder venezolano en el exilio, Antonio Ledezma, sirven para «chantajear» al Ejecutivo de Sánchez.