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El presidente francés, Emmanuel Macron, asiste a un almuerzo en las Naciones UnidasGetty Images via AFP

Macron viajará a Marruecos en octubre para relanzar las relaciones entre ambos países

Francia abrió la puerta a un acercamiento con el país magrebí al apoyar en julio su plan para el Sáhara Occidental como «la única base» capaz de resolver el conflicto con el Frente Polisario

El presidente francés, Emmanuel Macron, efectuará una visita de Estado a Marruecos «a finales de octubre» con el objetivo de confirmar el acercamiento entre ambos países, anunció este viernes a la AFP la Presidencia francesa.

El Rey marroquí Mohamed VI envió este jueves a Macron una carta de invitación en la que se congratula de los «prometedores horizontes que se perfilan» para ambos países, según la Presidencia francesa.

En su misiva, el soberano considera la visita como la ocasión de dar a la relación bilateral «una visión renovada y ambiciosa» en «varios sectores estratégicos», que «tenga en cuenta las prioridades» de ambos países, indicó esta fuente.

Francia abrió la puerta a un acercamiento con Marruecos al apoyar en julio el plan marroquí para el Sáhara Occidental como «la única base» capaz de resolver el conflicto con el Frente Polisario, que reivindica este territorio.

La disputa sobre el Sáhara Occidental se remonta a 1975, cuando el Gobierno español se retiró del territorio, desatando una guerra de 15 años entre Marruecos y el Frente Polisario, respaldado por Argelia.

El movimiento saharaui reclama un referéndum de autodeterminación previsto desde 1991, en el marco de un alto el fuego, que nunca se celebró. La ONU considera el Sáhara Occidental como «territorio no autónomo».

Actualmente, casi el 80 % de este territorio rico en recursos naturales está controlado por Marruecos, que propone un plan de autonomía bajo su soberanía. En 2022, logró el respaldo de España, que dio un inesperado giro a su posición tradicional.

El cambio de postura de Francia enfadó a Argelia, que llamó a consultas a su embajador en París, deteriorando sus complicadas relaciones bilaterales.

La visita de Estado busca pasar página de una serie de tensiones en los últimos años: desde la política de acercamiento de París a Argel hasta la reducción temporal de visados, pasando por las revelaciones de que Marruecos espió los teléfonos de Macron y de varios ministros, algo que Rabat negó.