El líder supremo de Irán pide a «todos los musulmanes del mundo» que apoyen a Hezbolá tras la muerte de Nasralá
El ayatolá Ali Jamenei ha sido trasladado a un lugar seguro dentro del país persa, donde se han reforzado las medidas de seguridad
El líder supremo de Irán, Ali Jamenei, ha pedido a «todos los musulmanes del mundo» que apoyen a Hezbolá, «ofreciendo sus recursos y ayuda» mientras que la organización terrorista libanesa «se enfrenta al usurpador, cruel y malicioso régimen sionista». Este llamamiento tiene lugar tras confirmarse la muerte del secretario general de la milicia chií libanesa, Hasan Nasralá, en el ataque israelí contra el cuartel general en Beirut, este viernes.
El ayatolá Ali Jamenei además ha sido trasladado a un lugar seguro dentro del país persa, donde se han reforzado las medidas de seguridad, según ha publicado Reuters citando a dos funcionarios regionales informados por Teherán.
Las mismas fuentes confirmaron que la República Islámica estaba en contacto permanente con Hezbolá y otros grupos regionales para determinar el siguiente paso después de que Israel anunciara que había matado al secretario general de la organización terrorista libanesa.
«Los criminales sionistas deberían saber que son demasiado pequeños para causar daños significativos a la sólida construcción de Hezbolá en el Líbano», escribió Jamenei en su cuenta de X, antes Twitter, tras confirmarse la muerte de Nasralá´.
Continúa: «La banda terrorista que gobierna el régimen sionista no aprendió de su guerra criminal de un año en Gaza y no comprendió que la matanza masiva de mujeres, niños y civiles no puede afectar a la sólida construcción de la organización de resistencia y destruirla. Ahora están intentando la misma política insensata en el Líbano».
Irán sabe que Israel puede operar con cierta facilidad dentro del propio país persa. El pasado mes de julio, el líder político de Hamás, Ismail Haniya, fue asesinado en Teherán, la capital iraní. Haniya murió por el impacto de un misil en la casa de huéspedes donde se alojaba con motivo de la toma de posesión del nuevo presidente iraní, Masoud Pezeshkian. Irán clamó venganza.
La República Islámica centró gran parte del discurso, ante la asamblea de las Naciones Unidas, del primer ministro israelí, Benjamim Netanyahu. El mandatario advirtió al régimen de los ayatolás que «no hay un lugar en Irán al que los largos brazos de Israel no puedan llegar». Instantes después, Netanyahu autorizaba la operación contra el barrio de Dahiye, en Beirut, que acabó con la vida del hombre de Irán en el Líbano.
Por su parte, el Ejército israelí afirmó, este sábado, que la «mayoría» de los dirigentes de Hezbolá murieron en el ataque contra su cuartel general y que, además, han bombardeado durante la noche más de 140 posiciones de la organización terrorista en Líbano, desde donde el movimiento islamista libanés dispara cohetes contra Israel en apoyo a su aliado Hamás en la Franja de Gaza.