Líbano
El número de desplazados por la guerra en el Líbano cae un 77 % tras la firma de la tregua con Israel
Miles de personas que huyeron de sus casas por la guerra han podido volver a sus hogares de forma segura
La cifra de desplazados registrados en refugios habilitados por las autoridades del Líbano en todo el país disminuyó en un 77 % tras el acuerdo de alto el fuego entre el grupo chií Hezbulá e Israel, que entró en vigor la madrugada del miércoles, informó este viernes el Gobierno libanés.
La Presidencia del Consejo de Ministros del Líbano dijo en un informe que «tras la entrada en vigor del alto el fuego, el pasado 27 de noviembre, el número de desplazados internos registrados en los refugios aprobados por la Sala Nacional de Operaciones hasta la fecha disminuyó en un 76,97 %».
Miles de personas empezaron a regresar a sus hogares en el sur y el este del país tras el anuncio de tregua, por lo que las autoridades del Líbano han cerrado 296 centros de acogida repartidos en todo el territorio.
Sin embargo, todavía quedan 33.758 desplazados internos que se encuentran en 713 albergues habilitados por las autoridades, que estiman que más de un año de violencia ha obligado a unas 1,5 millones de personas a abandonar sus hogares, aunque la gran mayoría no se ha registrado en los centros de acogida.
Además, según la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), más de 15.000 nacionales libaneses que cruzaron la frontera hacia Siria han vuelto al Líbano tras la entrada en vigor del alto el fuego, que obligó a más de 600.000 personas a cruzar hacia territorio libanés.
De acuerdo con el Ministerio de Salud Pública del Líbano, 3.961 personas han muerto y otras 16.520 han resultado heridas en poco más de un año de hostilidades, aunque se estima que unas 3.200 han fallecido en los dos últimos meses de escalada previos a la implementación de la tregua.
Por ello, las autoridades libanesas han comenzado a «realizar una revisión exhaustiva de todos los datos para incluir a los muertos que se recuperan gradualmente de debajo de los escombros», así como de las víctimas, «cuyas identidades se verificarán después de completar pruebas de ADN»