El choque de cañones de agua que ha abierto una nueva disputa entre China y Filipinas
Sendos países se acusan por las disputadas islas Spratly en el mar de China Meridional
Los guardacostas de Filipinas han acusado este miércoles a patrulleras chinas de disparar cañones de agua en el arrecife Scarborough, una zona disputadas por ambos países. Mientras tanto, China acusaba a Manila de intentar «invadir» su territorio. Filipinas afirmó haber realizado una «patrulla marítima rutinaria» con el fin de apoyar a embarcaciones pesqueras en Bajo De Masinloc. Así denomina Manila al arrecife bajo el control efectivo de Pekín desde 2012, cuando un navío chino «disparó un cañón de agua», según el portavoz de las fuerzas, Jay Tarriela.
Al menos seis embarcaciones chinas participaron en las «acciones agresivas» contra los navíos filipinos. Tarriela acusó a los chinos de intentar inutilizar con los cañones de agua las antenas de navegación del BRP Datu Pagbuaya, que fue también embestido «intencionalmente». Añadió que otras embarcaciones filipinas fueron objeto de acciones hostiles.
El portavoz de la Guardia Costera de China Liu Dejun declaró que buques de la Policía Marítima de Filipinas y otras embarcaciones «oficiales» del país insular intentaron «invadir las aguas territoriales» de las isla de Huangyan, como Pekín denomina a Scarborough. Según él, la parte china «ejerció control de acuerdo con la ley y los reglamentos» sobre las embarcaciones filipinas después de que estas se «acercaran peligrosamente» a los barcos patrulleros de la Guardia Costera del gigante asiático.
El incidente de tuvo lugar a penas dos días después de que Manila desplegara dos embarcaciones para patrullar el arrecife Rozul, situado al noreste de las disputadas islas Spratly en el mar de China Meridional, tras denunciar el «acoso» de un helicóptero chino a barcos pesqueros filipinos en la zona. Pekín, por su parte, negó las acusaciones y reivindicó su soberanía sobre las islas y sus aguas cercanas.
Ambos países han vivido una escalada de tensión en los últimos años debido a sus disputas soberanistas en el mar de China Meridional, por el que circula alrededor del 30 % del comercio global y que alberga el 12 % de los caladeros mundiales, además de tener potenciales yacimientos de petróleo y gas. Desde la llegada al poder de Ferdinand Marcos Jr. en 2022, Filipinas se ha mostrado más firme en la defensa de su territorio frente a China, que reclama prácticamente la totalidad de las aguas.