Oscar Pérez, el militar patriota que pagó con su vida sublevarse contra la dictadura de Maduro
Un día como hoy hace 7 años, el militar venezolano murió acribillado tras ser declarado «enemigo del Estado» por oponerse a la tiranía chavista
El 27 de junio de 2017, Óscar Pérez, un joven policía, realizó una acción de rebeldía ante la tiranía chavista que quedó grabada en la historia de Venezuela y lo llevó a la muerte en manos de las fuerzas de Nicolás Maduro el 15 de enero de 2018, un día como hoy hace 7 años.
Pérez, nació el 7 de abril de 1981, en el seno de una familia dedicada al cumplimiento de la ley. Sus padres trabajaron en los cuerpos policiales de Venezuela y le inculcaron desde muy joven una férrea disciplina y un firme sentido de justicia.
Pérez ingresó al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) y se destacó como operador táctico de élite en la Brigada de Acciones Especiales (BAE). Además, se convirtió en piloto de helicóptero, instructor de paracaidismo y buceador experto.
Para entonces el chavismo ya llevaba una década en el poder y Pérez notó que los engranajes de la institución estaban controlados por un entramado de corrupción, narcotráfico, lavado de dinero, terrorismo, criminalidad y represión política promovida por Hugo Chávez y luego por Nicolás Maduro.
La indignación ante la deshonra de la institución a la que se dedicaron en cuerpo y alma sus padres lo impulsó a dejar de ser un observador y convertirse en un actor directo en la lucha por la libertad de Venezuela.
El 27 de junio de 2017, pilotó un helicóptero del CICPC y sobrevoló Caracas mientras desplegaba una pancarta con el mensaje «350 Libertad» en referencia al artículo de la Constitución venezolana que establece que «el pueblo, en apego a su tradición republicana y su lucha por la independencia, la paz y la libertad, puede desconocer cualquier régimen, legislación o autoridad que contraríe los valores, principios y garantías democráticos o menoscabe los derechos humanos».
El acto de patriotismo de Pérez, sumado a posteriores mensajes en redes sociales grabados desde la clandestinidad, de inmediato lo pusieron en la mira del régimen bolivariano que lo declaró «enemigo del Estado».
El 15 de enero de 2018, su historia tubo un desenlace trágico. La casa en la que se encontraba escondido en El Junquito, en la periferia de Caracas, junto a otros seis hombres que se sumaron al llamamiento a sublevarse, fue rodeada por más de 600 efectivos de las fuerzas del régimen chavista.
Según los informes oficiales, Pérez y su grupo habrían ofrecido rendirse para evitar más derramamiento de sangre, sin embargo el gobierno de Maduro y Diosdado Cabello tenía previsto acabar con él y los suyos para enviar un mensaje claro a todos los policías y militares que estuvieran pensando seguir sus pasos.
La ofensiva fue brutal: cohetes, granadas y ráfagas de disparos acabaron con la vida de Pérez y sus compañeros, en lo que familiares y organismos de derechos humanos calificaron como una ejecución extrajudicial.
La historia del joven policía quedó inmortalizada en el documental «Oscar» que ofrece un retrato íntimo de un hombre que eligió la verdad y libertad sobre su vida.