Mélanie Joly, ministra de Asuntos Exteriores en Canadá
El G7 muestra su «apoyo total» al plan de Estados Unidos para Ucrania y amenaza con sanciones a Rusia
Ucrania aceptó este martes una propuesta de EE.UU. para que se declare entre Kiev y Moscú un alto el fuego total inmediato y prorrogable
Los ministros de Exteriores del G7 han acordado este viernes apoyar el plan de paz de Estados Unidos para Ucrania, según indicó esta mañana la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Mélanie Joly, quien subrayó que ahora «la pelota está en el campo de los rusos».
Ucrania aceptó este martes en Riad una propuesta de EE.UU. para que se declare entre Kiev y Moscú un alto el fuego total inmediato y prorrogable de treinta días en tierra, mar y aire. Ayer, el presidente ruso, Vladimir Putin, se mostró abierto a aceptar este plan, pero impuso unos matices para seguir llevando la voz cantante en la negociación.
Joly, poco antes de partir hacia Ottawa para participar en la toma de posesión del nuevo Gobierno canadiense, afirmó en un encuentro con medios de comunicación que tras largas conversaciones, los ministros de Exteriores han podido conseguir «unidad en una serie de temas».
«Me gustaría subrayar el de Ucrania. Todos los ministros de Exteriores se han mostrado de acuerdo con la propuesta de alto el fuego de EE.UU. y que es apoyada por los ucranianos», explicó.En caso de no aprobarse el alto el fuego, los ministros del G7 han debatido «imponer más costes a Rusia», incluida la implementación de «más sanciones y límites al precio del petróleo», y contemplan el «uso de ingresos extraordinarios» procedentes de los activos rusos inmovilizados en el extranjero.
Sobre Oriente Medio, el G7 solicitó la liberación de todos los rehenes en manos de Hamás y la reanudación de la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, pero el texto abandonó el lenguaje del establecimiento de dos Estados, Israel y Palestina, como solución al conflicto.
«Subrayamos el imperativo de un horizonte político para el pueblo palestino, logrado a través de una solución negociada para el conflicto israelí-palestino que cumpla las necesidades legítimas y aspiraciones de ambos pueblos y avance la paz, estabilidad y prosperidad globales del Oriente Medio», señalaron.
El G7 también trató la creación de un grupo de trabajo para Hispanoamérica, como había avanzado este viernes el ministro italiano de Exteriores, Antonio Tajani.
Los ministros denunciaron «la horrorosa violencia» de las bandas armadas en Haití y volvieron a solicitar «la recuperación de la democracia en Venezuela».
