Estas son las sanciones que pone Hacienda por revender un décimo de la Lotería de Navidad

La Lotería de Navidad, uno de los eventos más esperados en España cada diciembre, no solo atrae la emoción de la suerte, sino también la atención de las autoridades fiscales. Por ello, la Agencia Tributaria ha establecido múltiples sanciones para aquellos que decidan revender décimos de este sorteo de manera irregular.

Cuando se trata de la reventa de décimos, es fundamental comprender que esta actividad no está permitida sin los permisos adecuados. Las sanciones que pueden imponer las autoridades varían dependiendo de la gravedad de la infracción.

En general, cualquier persona que se encuentre vendiendo un décimo de la Lotería de Navidad sin la correspondiente autorización podría enfrentarse a multas que van desde un 50 % hasta un 150 % del importe de la venta. Además, en casos más graves, las sanciones pueden incluir incluso la posibilidad de ser llevados ante los tribunales.

Debido a lo mencionado, es importante tener presente que las multas no solo afectan al vendedor, sino también al comprador. Aquellos que adquieran décimos de forma ilegítima pueden verse obligados a pagar sanciones por participar en esta práctica.

Excepciones y regulaciones

Las administraciones de lotería autorizadas están sujetas a un marco legal que les permite operar con la venta y, por ende, la reventa de décimos de la Lotería de Navidad. A su vez, en el caso de que un décimo sea compartido por varias personas, es posible que se realicen acuerdos internos de venta y distribución entre familiares y amigos.

Asimismo, en ocasiones, hay lugares como bares, asociaciones o colegios que venden décimos con un incremento en el precio, conocido como sobrecargo. Este sobrecargo es legal únicamente si la entidad que lo aplica cuenta con una autorización expresa de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE).

Por todo ello, el no seguir las directrices establecidas por la Agencia Tributaria puede suponer un gran inconveniente, ya que las sanciones no solo afectan económicamente, sino que también pueden ir acompañadas de un historial fiscal negativo.