Servicio de ITV móvil usado por las fuerzas de seguridad a pie de carretera

Inspección técnica de vehículos

ITV itinere, qué es y por qué puede costarte una buena multa

Los agentes de tráfico de la Guardia Civil disponen de vehículos propios de ITV que pueden hacerte una inspección a pie carretera e inmovilizar el coche

Actualmente, más del 40 % del parque móvil nacional que debe haber pasado la ITV circula sin ella. Una verdadera barbaridad sobre todo si tenemos en cuenta que la siniestralidad y los fallecidos en carretera están en ascenso durante este año.

Existe también otro colectivo de conductores que van al volante de un vehículo que pese a disponer de la preciada pegatina de la ITV en vigor, circula con un coche que no está en condiciones para ello.

De cara a este colectivo, la Guardia Civil dispone de una flota de cinco vehículos ITV con los que pueden realizar una ITV en plena ruta y a cualquier vehículo.

Es cierto que no se trata de una inspección tan exhaustiva como la que se puede realizar en un centro especializado. Pero es más que suficiente para verificar determinados aspectos en los que los agentes puedan sospechar que se ha cometido una irregularidad. Por ejemplo en materia de peso, dimensión de neumáticos, cotas, emisiones contaminantes y un sinfín de elementos más.

Agente de tráfico de la Guardia Civil procede a verificar una furgoneta

De hecho se trata de una prueba relativamente habitual en camiones de carretera y autobuses.

Aquellas comunidades donde la DGT ha transferido las competencias a la policía local, como País Vasco, Cataluña o Navarra. Cuentan también con un servicio similar, aunque en este caso son las propias empresas de ITV homologadas en la región las que prestan servicio a las fuerzas de seguridad para desplazar un vehículo móvil de ITV, tipo furgoneta.

200 euros e inmovilizado

Estos se usan habitualmente para scooter o equipos agrícolas. De esta forma pueden realizar también ITV in situ en colaboración con las policías de tráfico locales.

En cualquiera de los casos si se detecta una infracción grave el vehículo será inmovilizado, y tendrán que retirarlo en grúa hasta su reparación, junto con una sanción que normalmente y en función del defecto suele ser de 200 euros.