La parte posterior imita un sistema de medición, una cámara y un flash

Insólito

Así funciona el radar simulado colocado por un vecino de San Sebastián y la multa que le puede caer

Modificar señales de tráfico e incluso poner nuevas donde no las hay está tipificado y sancionado dentro del Código de Circulación

Los vecinos del barrio residencial de Añorga, en San Sebastián, estaban ya cansados de que sus calles se hubieran convertido en un verdadero circuito para vehículos, que transitaban a velocidad elevada.

Los vecinos de la barriada llevaban meses solicitando que el Ayuntamiento de San Sebastián pusiera un radar de velocidad. Algo que por el momento no había ocurrido.

Según denuncia José Manuel, propietario del chalet donde han instalado el radar simulado, pese a que la zona está limitada a 30 kilómetros/hora no es extraño cruzarse con automóviles que superan los 60 y 70 kilómetros a la hora. Un verdadero peligro en una zona frecuentada por niños y personas mayores.

Doblan el límite de velocidad

El problema es que el barrio linda con el polígono industrial de Zuatzu y los trabajadores usan sus calles como acceso y salida del mismo para evitar atascos.

Imagen de la calle en cuestión limitada a 30 kilómetros/horaGoogle Maps

Ni corto ni perezoso, el propietario de una de las casas ubicada en la calle Atotxa Erraka Bidea ha decidido por su cuenta y riesgo instalar una caja con una pegatina reflectante que indica la velocidad máxima por un lado y con unos dispositivos que simulan cámaras y flash en el otro.

Según ha declarado a la prensa, no cree que pueda suponerle ningún problema legal, pues se trata de una propiedad privada. Pero también matiza que un agente de la policía municipal de la localidad le indicó que podría traerle problemas judiciales.

Entre otras cosas, se trata de un dispositivo que simula una señal de tráfico de limitación de velocidad, lo que puede provocar frenazos violentos de los conductores y con ello accidentes.

Situación irregular

Lo cierto es que, tal y como establece el Código de Circulación, todo lo que modifique el ordenamiento urbano y pueda afectar a la circulación se traduce en una multa.

En concreto, acciones como impedir la correcta visión de una señal de tráfico puede sancionarse con una multa de hasta 3.000 euros, sobre todo si se modifica o se deteriora la propia señal con interés manifiesto de estropearla.

Este es el caso contrario, pero existen precedentes, como el de un ciudadano gallego que por propia iniciativa pintó como línea continua una que era discontinua, lo que le supuso una sanción de 1.400 euros.

Imagen del límite de velocidad del falso radar

No parece tener demasiada importancia el hecho de que el radar esté puesto en una propiedad privada, pues la señal del límite de velocidad afecta a los vehículos que circulan por la calle. De acuerdo con el artículo 58 de la Ley sobre Tráfico, circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial:

Lo que dice la Ley de Tráfico

  • Salvo por causa justificada, nadie debe instalar, retirar, trasladar, ocultar o modificar la señalización de una vía sin permiso del titular de la misma o, en su caso, de la autoridad encargada de la regulación, ordenación y gestión del tráfico o de la responsable de las instalaciones.
  • Se prohíbe modificar el contenido de las señales o colocar sobre ellas o en sus inmediaciones placas, carteles, marcas u otros objetos que puedan inducir a confusión, reducir su visibilidad o su eficacia, deslumbrar a los usuarios de la vía o distraer su atención.

Desde el Ayuntamiento de San Sebastián, el alcalde Eneko Goia, confirma que el proceso para la instalación de un radar es lento, aunque ya está solicitado, pero lleva unos trámites que debe cumplir. Desconociendo por completo si la acción del atrevido particular supone sanción o no.