Así debes cargar el móvil en el coche si no quieres que se rompa

Pese a que ambos son herramientas imprescindibles a día de hoy, el móvil y el automóvil no parecen llevarse demasiado bien. El teléfono móvil es una de las principales causas de distracciones y accidentes al volante. De hecho la DGT confirma que el uso del teléfono al volante está detrás de dos de cada diez accidentes de tráfico.

Precisamente a raíz de la última Ley de Tráfico de marzo el uso del móvil al volante se castiga con 200 euros y con seis puntos del carnet. De hecho no se hace distinción entre hablar por el móvil o utilizarlo, lo que realmente se castiga es sostener el móvil en la mano, lo cual no deja lugar a dudas.

Nada de mecheros o USB

En paralelo diversos estudios realizadas por fabricantes de terminales confirman que la carga realizada directamente en los coches puede ser mala para el teléfono. Nos referimos siempre a la que realizamos a través de los puertos USB o el mechero, la más habitual.

En primer lugar los USB no están concebidos para la carga de teléfonos móviles, la potencia de salida de la batería no siempre es constante y no trabaja con la intensidad necesaria, pues ofrece un amperio cuando los móviles nuevos están cargando a dos y tres amperios.

Por otro lado los cables 'no oficiales' tampoco están optimizados para cargar de forma correcta. Están fabricados con materiales de baja calidad, especialmente los de los comercios chinos, y al ser universales no trabajan de acuerdo con las especificaciones técnicas del terminal en concreto.

Exceso de temperatura

En ambos casos provocan sobrecalentamiento en el móvil e incluso situaciones en las que el teléfono sencillamente se carga tan despacio que gasta más batería de la que recibe. Este tipo de cargas estropean la batería.

Si la única alternativa de cargar tu teléfono es el USB, asegúrate de usar siempre un cable oficial que cumpla las especificaciones oficiales. Si puedes descarta el mechero.

Pero sin duda la mejor opción es que uses la plataforma de carga inalámbrica de tu coche, aunque es cierto que tan sólo los coches modernos y muy equipados disponen de ella. Se trata de una superficie plástica con una alfombrilla de goma para que no resbale el terminal sobre la que colocamos el móvil para que se cargue por inducción sin necesidad de cable. Una solución cómoda y rápida que nos permite recargar su batería sin necesidad de cables y con la seguridad de que no deteriora el terminal.