Siniestralidad
DGT: 200 euros de multa y 4 puntos menos por llevar así el cinturón de seguridad
Más de un 25 % de los fallecidos en carretera por accidente no hacía uso del cinturón de seguridad
El cinturón de seguridad es obligatorio en las plazas delanteras de los automóviles desde 1975 y en las traseras desde 1992. Numerosos estudios a nivel mundial certifican que es una de las medidas de seguridad que más vidas ha salvado en el mundo.
De hecho, las estadísticas indican que su utilización reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente. Pese a ello en 2022 fallecieron más de 140 personas en carretera que no hacían uso del mismo, un 25 % del total de los fallecidos en carretera.
Cinturón y sillita
La DGT pone en marcha una campaña de control de utilización de este dispositivo y de sillitas de retención infantiles (SRI), otro de los elementos se seguridad más importantes desde que entrara en funcionamiento de manera obligatoria en 2003.
En este caso la campaña estará vigente durante toda esta semana y será llevada a cabo por los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, el helicóptero Pegasus, los drones de la DGT, policías locales y las 245 cámaras fijas para el control de utilización de este dispositivo. Pero atención porque los agentes no sólo vigilarán si llevamos puesto el cinturón de seguridad o no, sino que también controlarán el uso que se hace del mismo.
Tres casos concretos
De hecho la DGT adjunta imágenes de ocupantes ya sancionados en las que se puede ver cómo un conductor se pone el cinturón de seguridad ya en marcha, una mujer lo lleva puesto sobre un solo hombro mientras que lo que parece ser un niño lo lleva puesto a la altura de la barriga. Tres infracciones que están sancionadas exactamente igual que si no hicieran uso del dispositivo.
De acuerdo con estadísticas de tráfico el perfil de los conductores o acompañantes que no hacen uso del cinturón de seguridad es hombre joven que va sentado en los asientos delanteros del coche.
Según las estadísticas la utilización de sillitas infantiles evitan nueve de cada diez lesiones graves en niños e incluso fallecimientos. La no utilización de estos dispositivos en niños de hasta 135 centímetros de alto se sanciona con 200 euros y con cuatro puntos menos del carnet.