La conocida como fábrica de cristal produce el ID.3

Industria

VW podría cerrar una icónica factoría de coches eléctricos en Alemania y trasladar parte de la producción a China

Las bajas ventas del modelo ID.3 justificarían la decisión. La producción podría compensarse con un incremento de la fabricación en China o en las fábricas europeas de Zwickau o Wolfsburg

Pese a la falta de confirmación oficial parece que Volkswagen podría haber tomado la decisión de cerrar la factoría de Cristal de Dresde, donde fabricaba el eléctrico ID.3.

Se trata de un modelo icónico para VW al tratarse del primer eléctrico que estaba destinado a protagonizar buena parte de las ventas de la firma en este segmento, algo que nunca logró. En su momento se planteó como el VW Golf de los eléctricos.

El VW Golf de los eléctricos

La que es conocida como la factoría de cristal fue inaugurada en el año 2002 y entonces ya se convirtió en todo un icono para la marca, no tanto por el volumen de producción, como por lo que suponía producir dentro de ella vehículos en un entorno de lujo, con música clásica de fondo y con un grado de tecnificación altísimo.

La factoría de Cristal, todo un icono para la firma

El primero modelo allí fabricado fue el Phaeton y el nombre de fábrica de Cristal venía por estar completamente acristalada, lo que permitía ver su producción interior, con un nivel de automatización muy alto que reducía la presencia de operarios.

La casa de Volkswagen

Fue una de las principales factorías en el mundo en la que los carritos de componentes se movían de forma autónoma gracias a un sistema de raíles bajo la tarima, pues el suelo era de parqué.

La respuesta oficial de la marca germana no desmiente que se detenga la producción del modelo en la factoría y habla de «medidas para aumentar la competitividad global y responder así a la volatilidad del mercado».

Lo que sí hace Volkswagen es «asegurar el trabajo de los empleados de la factoría, respaldando el acuerdo de seguridad laboral sin cambios».

Su cierre supondría toda una declaración de intenciones sobre la realidad el programa de eléctricos de la firma, que no ha logrado ni de lejos alcanzar los objetivos previstos a causa de la baja demanda de eléctricos en el sur de Europa.

En paralelo, se trata de un coche que no ha encajado en ningún momento con los gustos de los compradores. De él se ha criticado desde el mal funcionamiento de la multimedia hasta sus acabados poco cuidados.

El primer modelo 100 % eléctrico de VW

La situación no deja de ser compleja para la firma que valora llevarse parte de la producción a China, donde ya se fabrica el que es prácticamente el mismo modelo que el europeo.

La pinza de Tesla

La bajada de precios de Tesla y la entrada de las marchas chinas han sido la puntilla a un fabricante que no tiene margen material para bajar los precios de sus coches eléctricos y ve una salida en trasladar la producción a China y traerlos en barco, donde los costes son menores. Una alternativa muy razonable si tenemos en cuenta que la marca vende el 50 % de su producción en China y que el ID.3 ya se fabrica allí.

Se trata de una situación que podría complicarse aún más si la UE finalmente pone aranceles sobre los coches fabricados fuera de Europa o les excluye del plan Moves 3.

Otra de las alternativas sería trasladar en paralelo parte de la producción del ID.3 a las fábricas de Zwickau o incluso Wolfsburg.

La factoría de cristal produjo 6.500 coches el año pasado y cuenta con 300 trabajadores que serían ser recolocados por Volkswagen.

Oliver Blume, CEO del grupo Volkswagen

Esta medida, con las que la marca podría ahorrar más de 20 millones de euros al año, forman parte del plan de Oliver Blume, el ceo del grupo, para reestructurar la firma y mejorar su nivel de rentabilidad.

Esta decisión se añade a la reciente reducción de plantilla y volumen de producción en la planta germana de Zwickau, la mayor de eléctricos de Europa, donde se producen los VW ID.3, Auqi Q4 y Cupra Born.