La historia tras el Rolls en el que ha viajado la Princesa, el mismo que usaron sus padres el día de su boda

Durante esta semana la Casa Real había anticipado todos los detalles del protocolo y la agenda de la jornada en la que la Princesa Leonor iba a jurar la bandera. Incluso el recorrido de la Familiar Real y su escolta a caballo era público, tan sólo algunos detalles no habían sido desvelados por motivos de seguridad.

Entre ellos y pese a que era de suponer, la Casa Real no había anticipado los vehículos en los que viajarían los Reyes y la Princesa y su hermana. Era de suponer que utilizarían alguno de los tres Rolls Royce Phantom IV de Patrimonio Nacional. Tres coches únicos de un total de 18 fabricados por Rolls Royce en los años 50.

Sólo 18 en el mundo

Inicialmente vieron la luz como un encargo para la Reina Isabel II y el Duque de Edimburgo, si bien Franco quedó prendado de ellos y encargó tres unidades. En ningún caso se trata de un regalo de Hitler a la corona ni nada parecido, como se ha llegado a oir. Como curiosidad, otra de las 18 unidades es propiedad del Rey de Marruecos.

Franco encargó una unidad de cinco plazas, otra de siete y una descapotable, todos en carrocería Mulliner, y los utilizaba habitualmente como medio de transporte para recorrer España.

Sólo un sutil detalle los diferencia de los Rolls Royce que vende la marca a los compradores ‘normales’, en este caso la insignia del capó, conocida como el Espíritu del Éxtasis, está arrodillada en muestra de respeto.

Se trata de un pequeño detalle que diferencia a los Rolls destinados a las familias reales de todo el mundo.

Poco después de las 10 de la mañana se despejaba la incógnita. Los Reyes han viajado en el Phantom IV cerrado, mientras que las Infantas lo hacían inmediatamente detrás en el descapotable, aunque en este caso por motivo de seguridad se ha optado por la misma solución que se utilizó durante la boda de los Reyes, utilizar una cobertura de cristal a modo de urna que les permite ser vistos sin riesgos a atentados.

En 2004, con motivo de la boda de los Reyes, un carrocero madrileño blindó el coche e hizo artesanalmente la cobertura de cristal que ya usaron entonces y que puede retirarse. La misma está realizada a prueba de balas y en aquel momento se decidió fabricar por la proximidad del atentado del 11-M.

Ambas unidades pertenecen a Patrimonio Nacional y están al servicio del Ejército de Tierra, de ahí que la matrícula que lucen no están en ceremonias oficiales contiene las letras ET.