Práctico
¿Quién te paga el coche si se le cae un árbol encima?
La borrasca Ciarán deja rachas de viento superiores a los 120 kilómetros/hora, lluvias torrenciales e incluso nieve
Estamos ante uno de los otoños más extremos que se recuerdan en materia climatológica. Borrascas y tormentas se suceden durante estas semanas, lo que está provocando serios problemas al tráfico. Balsas de agua e inundaciones y árboles caídos son los principales problemas, fenómenos ante los que conviene saber cómo actuar y a quién reclamar los daños, pues en muchos casos no son evitables.
Genéricamente el propietario del terreno donde está plantado el árbol debe responder de los daños causados si se produce la caída fortuita del mismo. En este caso el propietario de un coche debería reclamar los daños al dueño del terreno, que debería contar con una póliza de seguros que cubra este tipo de imprevistos.
El propietario del árbol
De esta forma si se cae un árbol en una vía propiedad del ayuntamiento de Madrid, el consistorio debería hacerse responsable en última instancia por falta de mantenimiento.
Por el contrario si la caída del árbol es consecuencia de factores climatológicos, lo más habitual, comenzará la guerra entre los seguros.
Genéricamente los seguros particulares se desentienden de este tipo de sucesos, por lo que nos tocará litigar con ellos. Al final el juez se remitirá a la fuerza con la que ha soplado el viento para dirimir quién debe pagar el siniestro.
Guerra entre seguros
Con vientos inferiores a los 120 kilómetros por hora deben ser los seguros particulares los que se hagan cargo del problema, siempre que tengamos suscrita una póliza a todo riesgo, pues si es a terceros será el propietario del coche quién pague ‘la fiesta’ si quiere recuperar el coche, otra cosa es que posteriormente reclame al propietario del árbol los daños.
También se haría cargo en caso de disponer de una póliza a terceros ampliada, que incluye algún tipo de imprevistos como el robo o la rotura de lunas, aunque habría que leer la letra pequeña.
Con vientos por encima de los 120 kilómetros/hora es el Consorcio de Compensación de Seguros quién se hace cargo del problema. Se trata de una entidad pública que respalda a todas las compañías de seguro y se hace cargo de las indemnizaciones en las que los seguros de los propietarios no están obligadas a responder, como el caso que hemos expuesto de la caída de un árbol.
Al fin y al cabo y aunque los conductores no sean conscientes, todos los meses pagamos abonamos una cantidad destinada al Consorcio en el seguro, por lo que su intervención en estos casos es obligada.