Industria
El complicado proyecto que quiere resucitar una fábrica de coches española abandonada hace 12 años
Un grupo empresarial ha presentado un proyecto para reiniciar la actividad productiva de la factoría de Linares abandonada desde hace 12 años
La pasada semana un unión temporal de empresas (UTE) presentaba un proyecto conjunto para la puesta en funcionamiento de la factoría de Santana en Linares. Esta fábrica fue puesta en funcionamiento por el Régimen de Franco en 1956 como Metalúrgica Santa Ana, nacía así una de las fábricas de coches con más solera del panorama nacional.
Durante los más de 55 años que estuvo en activo ha trabajado para marcas como Land Rover, Citroën o Suzuki, que han sido sus principales socios durante la vida comercial de la factoría, de la que ha salido modelos históricos como Santana, Vitara, Samurai o Jimny.
Una fábrica histórica
Propiedad de la Junta de Andalucía desde 1995, año en que la compró a Suzuki, Linares ha ostentado récord de los que no cabe sentirse orgullosos, como ser la factoría europea con mayor absentismo laboral (se decía que en la época de la recogida de la aceituna allí no aparecía ni un trabajador) o contar con un mafia en su interior que tiraba piezas de recambio al exterior para revenderlas posteriormente.
Una verdadera pena para la que en su momento fue el motor económico de Linares que daba empleo a más de 4.000 trabajadores. Finalmente en 2011 la Junta llegó a la conclusión de que la única solución era el cierre de la planta, tras la finalización del último pedido: 900 unidades del Anibal para el ejército rumano.
El último pedido
Precisamente el Aníbal fue el ganador del último concurso público del ejército a principio de siglo, donde competía con el gallego URO Vantac. A día de hoy el ejército dispone de 2.000 unidades de este todoterreno del que no hablan especialmente bien los militares por sus constantes averías.
Recientemente el Ejército ha lanzado una oferta pública de 310 millones de euros para la compra de un nuevo todoterreno tipo pick up, que puso en marcha a esta UTE capitaneada por el grupo de ingeniería JPG, que en su momento se hizo cargo de la fabricación y venta de los recambios de Santana.
Se trata de una de las tres ofertas que tiene el ministerio de Defensa sobre la mesa junto con la de Iturri y TSD. La primera basa su proyecto sobre el actual Ford Ranger, modificado en profundidad para cumplir con el pliego de condiciones, mientras que el proyecto TSD se basa sobre una plataforma de 4x4 de origen Peugeot.
Tres ofertas
Santana no ha confirmado aún el coche sobre el que llevaría a cabo su proyecto, pues se descarta por completo la inversión para el desarrollo y fabricación de uno nuevo, sino que debería partir sobre un coche ya en producción. En este caso se ha hablado de una plataforma china o de una puesta al día del polémico Aníbal.
Uro habría desechado la posibilidad de presentarse porque su oferta es demasiado extrema, el Vantac es un vehículo 100 % militar y la oferta es para un pick up mixto, que debe tener motor diésel y estar disponible con blindaje opcional.
En este caso la confirmación del proyecto supondría la puesta en funcionamiento de una factoría abandonada a su suerte desde hace más de 12 años, la UTE ha confirmado que inicialmente hablaría con antiguos trabajadores de Santana para su puesta en funcionamiento.
La alcaldía les apoya
La propia alcaldesa de Linares, Auxi del Olmo, ha firmado ya un acuerdo de intenciones con el responsable mercantil de la UTE.
En cualquier caso se trata de un proyecto muy complicado de llevar a buen puerto, pues reacondicionar y poner en funcionamiento una línea de montaje abandonada puede ser más cara que ponerla en funcionamiento desde cero.
Otra cosa es reacondicionar modelos fabricados por otra marca que se adaptarían a las condiciones exigidas en el pliego de condiciones, en cuyo caso hablaríamos más de un simple ensamblaje.