Casa Real
La bonita historia del coche español del Rey que «heredará» la Princesa Leonor cuando se saque el carnet de conducir
Hace casi 40 años que un fabricante preparó un coche muy especial para el entonces Príncipe por orden de su padre, el Rey Juan Carlos
Esta misma semana saltó a los medios que la Princesa Leonor, futura Reina de España, se está sacando el carnet de conducir en la Academia Militar de Zaragoza donde recibe formación junto a otros centenares de cadetes.
El período de formación militar, antiguamente conocido como la mili, ha sido tradicionalmente un momento excepcional para sacarse los carnet de conducir, pues existe la posibilidad de obtener prácticamente todos los carnet disponibles en función del destino en el que cumple funciones el militar y sus atribuciones.
Convalidación
Eso sí, posteriormente es obligatorio convalidar los carnet en tráfico, un mero trámite que incluye un test psicotécnico.
En este caso la Princesa Leonor estaría asistiendo a clases de conducción prácticas tras aprobar el teórico, algo que podría durar semanas o inclusos meses, por lo que todavía no estaría en posesión del carnet de conducir.
Un Seat Ibiza
Si viajamos 37 años atrás, en 1986 el Rey Felipe VI cumplía su mayoría de edad y recibía un sorprendente regalo de su padre: un flamante Seat Ibiza. En aquel momento el Seat Ibiza era el mejor exponente de la industria española del automóvil, un coche valorado en 850.000 pesetas, unos 5.000 euros.
Entonces el Rey Juan Carlos preparó en colaboración con Seat una verdadera sorpresa, una versión muy especial del Seat Ibiza que incluía una personalización propia con un color dorado que entonces no existía, un motor potenciado por Porsche con 100 caballos y un sistema que le permitía retrasar aún más el asiento del conductor, pues el Príncipe literalmente no cabía al volante.
El día de su cumpleaños
Cuando recibió el coche el Príncipe Felipe literalmente no tenía carnet, pues no lo obtuvo hasta semanas después. El vehículo permanece hoy en el museo Seat y hace unos años la marca preparó un emotivo reencuentro con el Rey, que quedó visiblemente emocionado de ver a su primer coche.
Ahora, cuatro décadas después, la historia podría repetirse y la futura Reina de España podría ponerse a los mandos del Ibiza con el que aprendió a conducir su padre, que se encuentra en perfecto estado de marcha gracias a Isidre López, responsable de la colección de históricos de la marca y a todo su equipo. Un detalle precioso.