Un informe de Bruselas desvela que los coches europeos gastan hasta un 20 % más de lo que prometen las marcas

El consumo de combustible y con ello las emisiones contaminantes de CO2 se han convertido en una verdadera obsesión tanto para Bruselas como para los fabricantes y sobre todo para los conductores, que ven cómo el consumo de combustible real de su coche durante el día a día tiene poco o nada que ver con lo prometido por los fabricantes en los folletos publicitarios.

Un consumo idealizado

Por primera vez en la historia se ha podido realizar un estudio realista, tomando como base los consumos medios de combustible registrados en las ITV de toda Europa, un dato que desde hace un año Bruselas obliga a recopilar a todos los organismos europeos equivalentes a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) española.

El estudio arroja un resultado demoledor, pues la media de consumos acumulados por los coches certificados en las ITV fue hasta un 20 % superior al homologado por los fabricantes mediante protocolo WLTP.

Hasta dos euros por kilómetro más

Esto significa que un coche que homologue unos 10 euros a los 100 kilómetros de consumo pasaría a gastar dos euros más, unos 12 euros, aunque en el caso de los híbridos enchufables la diferencia sería aún mucho mayor.

Hace ya meses que los coches que pasan por la ITV realizan una nueva prueba denominada OBD por el nombre del puerto del vehículo a través del que se realiza, y que permite al inspector acceder al historial de funcionamiento del vehículo almacenado en la centralita, donde se almacenan desde las posibles averías hasta el consumo real de combustible acumulado, un dato a partir del cual se ha hecho este estudio.

Por combustibles los coches de gasolina consumen casi un 24 % más de lo homologado en las fichas técnicas, por un 18 % de los coches de gasóleo, una dispersión que es especialmente llamativa en el caso de los coches con motor híbrido enchufable, que homologan de media 1,3 litros a los 100 kilómetros y en la máquina arrojaron un consumo medio cercano a los 6 litros a los 100 km.

Híbridos enchufables: el desastre

En el caso de los híbridos enchufables la realidad es que muchos conductores optan por no cargarlos nunca, hay que tener en cuenta que una vez que se agota la batería el consumo de combustible se dispara por el exceso de peso del equipo eléctrico.

Este estudio ha sido posible gracias entre otros organismos a AECA-ITV España, la patronal que aglutina a las ITV y que ha facilitado datos de casi un millón de vehículos, entre turismos e industriales.

En paralelo la Unión Europea denuncia la falsedad de datos en materia de emisiones, que también serían hasta un 20 % superiores a las prometidas por los fabricantes.