La sorpresa final de la ITV para el inspector
Práctico
El truco infalible para pasar la ITV a la primera todos los años
Nada mejor que un poco de ingenio para hablar de una prueba que amarga la vida de miles de conductores que ven cómo sus coches no superan los mínimos
La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se ha convertido en un dolor de cabeza para millones de conductores, que ven cómo deben invertir cientos de euros en coches viejos si quieren seguir circulando con ellos, y con las limitaciones que suponen las Zonas de Bajas Emisiones.
La prueba de humos o emisiones se ha convertido en el ogro de la ITV, pues es el principal motivo de suspenso al ser cada vez más precisa, pues ahora los inspectores se conectan a la centralita de los vehículos a través del puerto OBD para conocer las emisiones exactas acumuladas de un vehículo.
Muy preciso
Según datos de las ITV de Madrid, de los 2,4 millones de coches inspeccionados en 2023 un total de 212.000 suspendieron por las emisiones, lo que significa que un 9 % de los vehículos suspende por este motivo, casi 1 de cada 10.
La ITV cada vez es más dura
En segundo lugar están los problemas de alumbrado y señalización (8 %), las averías de ejes, ruedas, neumáticos y suspensión (6 %) y los frenos (2,4 %).
Siempre con humor
En cualquier caso este influencer nos da un divertido consejo relacionado con la inspección, en este caso si nuestro objetivo es pasar la ITV a la primera no hay más que esconder estratégicamente billetes en la parte baja del automóvil, incluido un chupa chups en el escape del vehículo.
Billetes en los bajos del coche: qué puede salir mal
Por supuesto se trata de una simple parodia del que es el único test de fiabilidad mecánica que tienen los vehículos en la actualidad y que aunque es manifiestamente mejorable sirve como filtro para dejar en el garaje miles de coches que no están en condiciones de circular.
Despido procedente
Conviene recordar que tratar de sobornar a un inspector de la ITV es un delito grave y si el inspector se deja sobornar es causa de despido procedente.
Tal y como piden los conductores deberían perseguirse más los problemas mecánicos relacionados con la seguridad de los coches y menos las emisiones. Una situación que ha llevado al absentismo a la ITV a niveles de récord, pues en torno a 4 de cada 10 coches que deben pasar la prueba ni se presentan.