Seguridad vial
El truco de la Guardia Civil para saber si ves bien al volante
Los problemas visuales afectan a muchos más conductores de los que pensamos y el problema es que muchos de ellos no son conscientes de la gravedad
Aunque parezca mentira, hasta tres de cada diez conductores ha tenido problemas al volante para identificar señales o paneles luminosos en las carreteras españolas, un dato muy preocupante si tenemos en cuenta la importancia de ver bien al volante
Se trata de una patología que afecta directamente a la seguridad vial, pues la visión es el sentido más importante a los mandos de un vehículo. Desde una simple miopía hasta el astigmatismo están detrás de muchos accidentes de tráfico, pues se trata de problemas visuales que, además, se acentúan durante la noche.
Incompatible al volante
De acuerdo con la DGT, hasta un 80 % de los conductores sufre un problema visual, mientras que el 30 % sufre hasta dos simultáneamente y un 14 % tres patologías al mismo tiempo.
La Dirección General de Tráfico identifica a los conductores con problemas visuales con un código en la parte trasera del carnet de conducir que indica la necesidad de llevar gafas o lentillas al volante.
Esta inscripción ayuda a los agentes de la Guardia Civil de Tráfico a saber que la persona en cuestión debe utilizar dispositivos de corrección, ya sean gafas o lentillas.
Gafas o lentillas
El problema es que el intervalo que trascurre entre las renovaciones del carnet de conducir, normalmente una década, es demasiado largo y puede provocar que un conductor sufra nuevas patologías visuales al volante, o se agraven las que ya sufre, lo que significa que no ve bien al volante y no está capacitado para conducir.
Principales problemas visuales al volante:
- Presbicia: 42 %
- Miopía: 39 %
- Astigmatismo: 39 %
- Hipermetropía: 18 %
Así las cosas, existe un sencillo truco de carretera que puede utilizar la Guardia Civil y que le permite descubrir si un conductor ve bien al volante o no. En este caso se trata de una prueba de agudeza visual que consiste en leer la matrícula de un coche a una distancia de unos 20 metros, una prueba tan sencilla como eficaz para identificar este tipo de situaciones.
Aquellos conductores que estén operados para corregir algunas de estas patologías al volante deben llevar un certificado médico en el coche, pues los agentes pueden llegar a multarles si no llevan puestas las gafas tal y como indica el carnet.