En torno a los colegios es habitual ver barbaridades como la de la imagen

Práctico

El sencillo gesto que la DGT pide a los conductores este año al llevar los niños al cole

Se trata de mejorar la seguridad de una acción que pone en riesgo la integridad de los más pequeños y puede costarnos una buena multa

Llevar y recoger los niños en el colegio forma parte de la rutina diaria de millones de padres en este país, una maniobra que además de suponer un riesgo para los niños cuando se hace mal, se convierte en un verdadero problema para la circulación en las zonas donde hay centros escolares, que se colapsan un par de veces al día.

Para empezar conviene saber que la reglamentación para esta maniobra es responsabilidad de las administraciones locales, por lo tanto deben ser los ayuntamientos los que las regulen, aunque siempre dentro del marco legal del Reglamento General de Conductores de la DGT.

Los ayuntamientos mandan

En este caso la forma de actuar es diferente en función de la ciudad en la que nos encontremos, en algunas se ha optado por crear áreas específicas kiss and go, en las que se habilita una zona específica cerca a la puerta del centro escolar para que los padres puedan parar y sin bajarse del coche puedan dejar o recoger a los niños en segundos.

Las zonas kiss and go cada vez son más habituales

En otras ciudades como Madrid la normativa establece que está permitido pararse por un tiempo máximo de dos minutos para permitir que alguien suba o baje del coche, pero con una peculiaridad, la parada debe realizarse en una zona en la que no se interrumpa el tráfico, lo que excluye las paradas en doble fila, vados o similares...

Parar sin molestar

En este caso conviene saber que el ayuntamiento podría sancionarnos con hasta 200 euros por esta maniobra que algunos realizan hasta dos veces al día.

Desde la DGT apuesta por una método llamado el truco de la mochila. En este caso consiste en que los niños lleven siempre la mochila en el maletero del coche, esto significa que el conductor no parará en cualquier sitio para que los niños se bajen, sino que deberá aparcar en un lugar correctamente estacionado donde la maniobra será mucho más segura para los niños y menos molesta para otros conductores.

Por si esto fuera poco, con este gesto evitamos el peligro que supone llevar dentro del coche un objeto suelto como es una mochila en caso de accidente.