Los logos traseros ocultan funciones muy útiles en ocasiones
Práctico
La función desconocida que ocultan los logos traseros de los coches
Otro de los secretos de algunos coches al descubierto, una parte aparentemente decorativa oculta una función que pocos conocen
Los coches son una verdadera caja de sorpresas, el paso del tiempo y la optimización de costes hacen que muchas veces los fabricantes usen determinados componentes para otras funciones necesarias paralelas a las habituales.
Por ejemplo hace ya años que la luneta térmica trasera sirve como antena para la radio y para el equipo multimedia del vehículo, una función desconocida para muchos pero muy útil y que evita disponer de la antena exterior.
La función perfecta
En este caso las funciones del logo trasero son insospechadas. Hace ya años que el Seat Leon fue uno de primeros modelos en esconder en el logo una funcionalidad inesperada: pues servía para abrir el portón del maletero y evitaba los tradicionales tiradores, una función que abarata y mejora la estética.
El logo trasero bascula en algunos coches para abrir el maletero
Hoy en día son muchos los fabricantes que se han sumado a esta moda, entre ellos por ejemplo BMW o Volkswagen, basta dar media vuelta a este logo para poder abrir el portón del maletero con facilidad.
Otra función más
Pero posteriormente llegó una función más tecnológica y llamativa aún. En este caso el logo sirve para esconder la cámara trasera, de esta manera cuando metemos la marcha atrás el logo gira ligeramente y deja al descubierto la cámara, que a la vez proyecta las imágenes posteriores en la pantalla multimedia para ayudarnos a aparcar o a lo que podamos necesitar.
La cámara se despliega al meter la marcha atrás
En este caso además se soluciona uno de los problemas más habituales de las cámaras de los coches, pues la lente de la cámara va más protegida de suciedad y vandalismo al ir oculta con este mecanismo.
En lo negativo, la complejidad de un mecanismo que obliga a contar con un motor adicional en el logo, como tal es susceptible de averiarse o romperse con el uso, pues hay que tener en cuenta que se acciona cada vez que usamos la marcha atrás.