El agua se ha llevado por delante centenares de coches

Seguridad vial

¿Qué hay que hacer y qué no hay que hacer nunca si te pilla una riada al volante del coche?

Desafortunadamente Valencia ha vuelto a vivir una jornada dramática a causa de las lluvias, un temporal que nos deja miles de afectados y centenares de coches flotando

Año tras años nos sorprenden las mismas imágenes de riadas en algunas zonas de España donde son especialmente habituales. En estas condiciones es llamativo ver cómo coches que pesan entre 1.500 y 2.000 kilos flotan como si fueran de juguete.

Habitualmente van vacíos al tratarse de vehículos que estaban aparcados en lugares no adecuados, en zonas bajas que tienden a inundarse en caso de problemas de este tipo.

Ojo dónde aparcas

Aquí la primera recomendación, conviene evitar siempre aparcar el coche en lechos de ríos secos, zonas bajas y aliviaderos de agua. Se trata de un consejo sencillo se seguir y que puede proteger nuestro vehículo.

La DGT da estas instrucciones pasa salir airoso de una riada

En caso de ir dentro y ser sorprendido por balsas de agua o directamente por una riada la situación se complica aún más. El primero y mejor de los consejos que puede darse es no ponerse jamás en carretera con aviso de tormentas fuertes, ni que decir tiene que si el aviso es de DANA, con más razón el mejor consejo es no salir en carretera.

Nunca en carretera

En caso de estar ya en carretera y ver una bolsa de agua jamás hay que intentar cruzarla con el coche salvo que las fuerzas de seguridad nos lo digan, pues ellos conocen la profundidad y sobre todo lo que hay en el lecho de la misma. En caso contrario directamente hay que dar la vuelta y buscar una vía alternativa.

Nunca hay que olvidar que los coches flotan con relativa facilidad

Por último en el peor de los casos, si somos sorprendidos por una riada debemos mantener siempre la calma. Si el nivel del agua no supera la altura de los neumáticos lo normal es que no tengamos problemas, mantendremos control sobre el coche y en este caso lo mejor es buscar una zona elevada desde donde evitemos el peligro de que nuestro coche salga flotando.

Mientras mantengamos el control del coche conviene no abandonar el interior nunca y buscar zonas elevadas para evitar el agua.

La altura del agua: la clave

Si es el caso de que notemos nuestro coche flotar las cosas se complican mucho, debemos intentar abandonarlo saliendo por la ventanilla (rompiéndola si hace falta) o por la puerta, siempre eso sí en sentido contrario a la corriente para que el coche no nos pase por encima.

Subirse encima del coche siempre que haya dejado de flotar y no vaya a la merced del agua

Si el coche queda atascado en un lugar firme podemos valorar subirnos al techo, un lugar desde el que es fácil que nos vean y desde donde podemos pedir ayuda.

En estos casos hay que pedir siempre ayuda a las fuerzas de seguridad, dando nuestra posición, es la única manera de que puedan socorrernos.