El incremento del diésel lo igualará a la gasolina

Práctico

Tiene sentido llenar el depósito del coche para ahorrar de cara a la subida del diésel anunciada por Sánchez

A falta de que sea aprobada en el Congreso, esta medida incrementará la recaudación del Gobierno en más de 2.000 millones de euros

El Gobierno ha incluido un incremento de los impuestos al diésel como una de sus medidas estrella en los próximos Presupuestos Generales del Estado de cara a la negociación con Europa del último tramo de ayudas de 6.500 millones de euros, aunque no sea la única.

Esta medida es del agrado del lobby ecologista de Bruselas, que persigue la desaparición de este combustible desde hace años y es similar a la que han anunciado ya otros países como Alemania o Francia, aunque ellos han apostado por subidas más progresivas, pues de hecho pretenden alcanzar la paridad de precios en 2030.

Entre 10 y 11 céntimos

Este incremento de precios vía impuestos (entre 10 y 11 céntimos por litro) igualará tácitamente el precio del litro de gasóleo y el de gasolina, algo que el Gobierno de Pedro Sánchez ya intentó en sus primeros presupuestos generales de 2020, aunque entonces ya se encontró con la oposición vasca para sacarla adelante.

El sobrecoste rondará los 6 euros por depósito

La medida todavía no es definitiva, pues aún tiene que pasar por el Congreso, donde Pedro Sánchez no cuenta con los apoyos necesarios para su aprobación, lo que podría provocar que no saliera adelante, al igual que ya ocurrió en 2020.

¿De qué depende?

En caso de salir aprobada entraría en funcionamiento el 1 de abril de 2025, un incremento de precio que para el propietario de un coche medio con un depósito de entre 50 o 60 litros de capacidad rondaría los 6 euros cada vez que lo llena.

Se trata de una medida muy impopular que afecta fundamentalmente a las clases menos favorecidas que conducen coches de segunda mano, que en su gran mayoría son diésel, pues entre los coches nuevos apenas se venden ya.

La medida afecta muy negativamente a los coches viejos

El Gobierno ha confirmado también la existencia de dos excepciones, por un lado, los transportistas no pagarán este aumento de precio, y en caso de que el litro de gasóleo supere los dos euros, tal y como ya ocurrió hace dos años, se volvería al tipo impositivo anterior.

Tal y como ocurre en España desde hace años, cada anuncio de una subida del precio del carburante va seguida de colas de conductores en las gasolineras para llenar el depósito, algo que en este caso solo tendría sentido hacer a finales de marzo si finalmente entra en vigor el 1 de abril.