En estas fechas es normal que los coches amanezcan así
Práctico
El truco milagroso para quitar el hielo del parabrisas por la mañana
Nada de rasquetas ni de productos para rociar los cristales, con este truco te bastarán segundos para quitar el hielo del parabrisas
Aunque falta casi un mes para la llegada oficial del invierno estos días las temperaturas pueden considerarse ya invernales, con nevadas y heladas importantes durante la noche.
No hay cosa más molesta que llegar al coche en una gélida mañana y encontrarse con una capa de varios milímetros de hielo sobre todo el automóvil, que cubre tanto el parabrisas como todos los cristales del vehículo.
Cuida la carrocería
En este caso hay miles de trucos a caballo entre la realidad y la leyenda urbana, algunos incluso pueden ser peligrosos para la integridad del parabrisas o de los cristales en los que lo apliquemos.
Cuidado con los productos milagro y con los químicos, que los parabrisas son muy caros
Hablamos por ejemplo de utilizar a modo de rasqueta algún instrumento metálico poco apropiado, que puede llegar a rayar el cristal o incluso romperlo si nos da por echar algún producto caliente como puede ser agua.
Cuidado con lo que haces
Es cierto que determinados productos como un poco de alcohol de quemar disuelto en agua es extremadamente eficaz y no hay más que rociar con un spray para que el hielo desaparezca en décimas de segundo.
El truco definitivo
Existe un truco aún más rápido y sencillo, para nosotros el mejor que ha pasado por nuestras manos. Consiste en echar agua templada en una bolsa, es muy importante que sea templada, no caliente.
Basta con deslizar la bolsa sobre el cristal, milagroso
Una vez en el coche no tenemos más que pasar la bolsa rellena de agua templada por los cristales y sorprende la manera en la que el hielo simplemente desaparece.
El resultado es espectacular en segundos
En este momento es importante que arranquemos el coche y pongamos la climatización en marcha, para evitar que los restos de agua que han quedado por el cristal vuelvan a provocar la formación de una capa de hielo.
Hay que tener en cuenta que el gran número de sensores y cámaras provoca que los parabrisas de ahora sean muy caros y convenga cuidarlos con esmero.
