Galp convierte las farolas en cargadores para vehículos eléctricosWALTER BRANCO

Enchufar el coche a la farola, el sueño de muchos conductores se hace realidad

Esta solución permite aprovechar la infraestructura eléctrica existente, agilizando y reduciendo los costes de ampliación de la red de recarga pública

Con la llegada del coche eléctrico a nuestras vidas, muchos se han preguntado por qué las farolas de las calles no se podían convertir en puntos de recarga.

Esta solución, sencilla a priori, se encontraba con el problema de que el alumbrado público no podía utilizarse con fines de recarga de vehículo de forma gratuita, tampoco había forma de facturar los kW consumidos y poner en marcha esta infraestructura sería muy costoso para las arcas públicas de las ciudades.

Ahora, Galp ha anunciado que va a proceder a la instalación de un sistema de recarga de vehículos eléctricos en farolas públicas.

Galp convierte las farolas en cargadores para vehículos eléctricosWALTER BRANCO

Este proyecto pretende ampliar la red de recarga de vehículos eléctricos en entornos urbanos, «haciéndola más cómoda y accesible», según explican. Al aprovechar la infraestructura de alumbrado público, el proyecto también contribuye a reducir el tiempo y el coste de instalación de nuevos puntos de recarga lenta, mitigando la necesidad de nuevas ampliaciones de potencia en la red y reduciendo la ocupación de espacio adicional en las aceras.

Una necesidad

«Se trata de una necesidad acuciante en los grandes centros urbanos», afirma João Diogo Marques da Silva, EVP Comercial en Galp. «En las áreas metropolitanas de Lisboa y Oporto, por ejemplo, más de la mitad de las viviendas familiares no disponen de aparcamiento o garaje, lo que significa que los puntos de recarga tendrán que ser proporcionados por la red pública a través de soluciones como ésta», añade.

En las áreas metropolitanas de Lisboa y Oporto más de la mitad de las viviendas familiares no disponen de aparcamiento o garajeJoão Diogo Marques da SilvaEVP Comercial en Galp

Además de los puntos ya en funcionamiento en Lisboa y en la antigua Refinería de Matosinhos, ubicada en Oporto, Galp está trabajando en la provisión de puntos de recarga para vehículos eléctricos basados en esta tecnología en otras partes del país luso. El desarrollo de la red de movilidad eléctrica de Galp se apoya en proyectos de innovación tanto en Portugal como en España, donde la empresa ha puesto en marcha el proyecto «Second Life Batteries».

Galp convierte las farolas en cargadores para vehículos eléctricosWALTER BRANCO

Esta iniciativa, localizada en la estación Galp Alcalá de Henares, tiene como meta la reutilización de baterías de vehículos eléctricos al final de su vida útil para alimentar la red de cargadores ultrarrápidos, pudiendo cargar hasta nueve vehículos consecutivamente utilizando una potencia mínima de la red.

Ambos proyectos están alineados con el objetivo de ampliar la red de puntos de recarga eléctrica operada por la compañía, la mayor de Portugal, que actualmente cuenta con más de 5.500 puntos instalados en Iberia. Fruto de este liderazgo, Galp alcanzó en octubre el hito del millón de recargas en su red de movilidad eléctrica, superando en apenas 10 meses el récord de todo 2023.