Los trabajadores durante los paros
Industria
Más de 100.000 trabajadores secundan la huelga de Volkswagen en Alemania
Los paros, de dos horas, afectaron a la producción de la empresa durante dos jornadas consecutivas. Empresa y sindicatos negocian despidos y el cierre de tres plantas
Casi 100.000 trabajadores de las fábricas de Volkswagen se han unido a la primera jornada de huelgas contra el fabricante en Alemania el pasado lunes y la mañana de este martes, según detallan los sindicatos que han participado.
La serie de paros laborales de dos horas fue convocada por el sindicato IGMetall para protestar contra las amenazas de recortes salariales, cierres de plantas y despidos masivos en Volkswagen. La última huelga de los empleados de la marca se produjo durante el turno de noche, y el trabajo se reanudó con el inicio del turno de mañana habitual el martes.
Huelgas parciales
Las huelgas tuvieron lugar en nueve de las diez fábricas de Volkswagen en Alemania, según recoge DPA, con los trabajadores protestando ante los recortes que está impulsando la dirección del mayor fabricante automovilístico en Europa.
Los coches eléctricos no se venden al ritmo necesario
Los directivos del grupo sostienen que son necesarios recortes profundos para mantener la competitividad del fabricante de automóviles, aumentar los beneficios y financiar las inversiones necesarias en el futuro de la marca, incluidos los vehículos eléctricos.
Problema de demanda
Según los ejecutivos de Volkswagen, la marca homónima también sufre un exceso de capacidad significativo en sus fábricas en Europa, y se ha visto golpeada por una caída de la demanda y una feroz competencia internacional, especialmente en su mercado chino. El fabricante también ha tenido dificultades para lanzar y comercializar modelos de vehículos eléctricos, frente a los cuales no despega la demanda en el continente.
Así, el sindicato contabilizó un total de 98.650 participantes, una gran parte de los más de 130.000 trabajadores de las fábricas de Volkswagen en el país centroeuropeo.
«Las primeras huelgas de advertencia fueron una señal absolutamente decidida de la fuerza laboral contra los duros planes de gestión de Volkswagen», ha comentado el negociador jefe de IG Metall, Thorsten Gröger.
La próxima semana están programadas más negociaciones de entre el sindicato y la dirección de Volkswagen. Los líderes sindicales ya han amenazado con una mayor escalada si la empresa no está dispuesta a ceder. Los sindicatos exigen aumentos salariales y protección laboral, y han prometido oponerse ferozmente a cualquier intento de cerrar plantas.