La M-30 también forma parte de las Zonas de Bajas Emisiones

Circulación

La única condición que el Ayuntamiento de Madrid va a exigir a los coches sin etiqueta para circular

El Ayuntamiento argumenta que la excelente calidad del aire registrada durante los últimos meses le permite tomar esta decisión

Finalmente llegó la noticia tan esperada por los conductores madrileños y por los que no viven en Madrid pero visitan la ciudad con frecuencia. El Ayuntamiento ha confirmado una prórroga de un año para todos los coches sin etiqueta, que podrán seguir circulando hasta el 31 de diciembre de 2025.

Aunque los datos no son muy preciosos, pues existe un número muy importante de vehículos zombi que pese a estar dados de alta realmente no existen ya, se calcula que en España hay matriculados en torno a 25 millones de coches, de los cuales unos seis millones no tienen derecho a etiqueta, son los llamados etiqueta A.

Marginados el asfalto

Si nos ceñimos a la capital podemos hablar de 1,4 millones de coches, de los cuales unos 400.000 no tienen derecho a etiqueta.

Madrid se vuelve a abrir a los coches sin etiqueta

Hace ya dos años que estos vehículos tienen prohibida la entrada a la capital, aunque una excepción les ha permitido circular siempre que cumplieran una condición.

La condición

En este caso tanto el titular como el vehículo deben estar ‘empadronados’ en la capital, lo que en el caso del coche significa que pague el impuesto de circulación en la misma, además el coche debe estar a nombre del titular desde antes de 2022 para evitar que los madrileños se acogieran a esta excepción de manera precipitada comprando coches viejos.

Los vehículos históricos y los coches sin etiqueta podrán seguir circulando

Este período de carencia de 12 meses va a permitir que los madrileños que tengan en propiedad un coche sin etiqueta puedan seguir conduciendo sus vehículos a diario, aunque en el ayuntamiento no hablan de una rectificación en las Zonas de Bajas Emisiones sino de un simple periodo de pruebas.

Este colectivo se suma, al menos durante estos 12 meses, a excepciones como los vehículos históricos, los vehículos de transportistas de más de 59 años o los que hayan comprado uno nuevo pero no se lo hayan entregado todavía.