Repostas, un gesto obligado en todos los conductores
Práctico
El dueño de una gasolinera explica por qué conviene llevar siempre más de medio depósito de combustible
Cuando hablan los expertos se acaban las leyendas urbanas, en este caso la razón que da es más que concluyente
Los combustibles vuelven a convertirse en uno de los asuntos que más ocupan a los conductores. Más allá de su precio, que se ha mantenido bastante estable durante los dos últimos años, hay decenas de trucos y curiosidades que rodean a estos productos derivados del petróleo.
A la hora de repostar hay teorías para todos los gustos, desde las que indican que lo mejor es repostar por la mañana porque el combustible ‘ocupa’ menos espacio y ‘cabe más’ en el depósito a las que dicen que lo mejor es repostar cuando el depósito está casi vacío para evitar molestias e incluso por un motivo de consumo para reducir el peso.
Verdad verdadera
Todas tienen parte de realidad y parte de leyenda urbana, aunque en este caso cuando quien te indica cómo debes repostar es Joseba Barrenengoa, CEO y fundador de Easygas, una compañía con casi 20 estaciones de servicio en España conviene hacerle caso.
Cada vez es más habitual que repostemos nosotros mismos en las gasolineras
En este caso el técnico explica que conviene no dejar que el depósito se vacíe mucho antes de echar combustible.
Mejor que no se vacíe
En este caso toda la zona del depósito que no está ocupada por combustible se llena de aire, esto favorece la formación y condensación de agua, uno de los peores enemigos del motor porque favorece la oxidación de los metales.
Se trata de una explicación tan razonable como sencilla de entender, al fin y al cabo la mayor parte de las partes del motor son de metal y con ello víctimas del óxido.
En cambio, cuando más lleno está el depósito hay menos aire y con ello menos humedad, lo que evita que los filtros que eliminan el agua se estropeen.
Conviene también echar siempre combustibles de calidad con aditivos que evitan la condensación de agua, que como hemos dicho puede ser responsable directo de una avería de motor importante y cara.