
Cada vez hay más gasolineras de autoservicio
Carburantes
Un gasolinero advierte de la falsa avería que podemos provocar por repostar mal
Se trata de un problema mucho más habitual de lo que pensamos en los coches modernos y que tiene una solución muy sencilla sin pasar por el taller
Hace ya décadas que los controles de emisiones de los vehículos entraron en vigor en casi todo el mundo, Europa se enorgullece siempre de tener algunos de los controles más restrictivos en los coches, hasta tal punto de que las normas Euro han mandado ya al desguace a millones de vehículos por no superar las pruebas de contaminación.
En este caso es un gasolinero quién nos explica un problema muy habitual en los coches modernos que provocamos tras repostar en una gasolinera. En este caso está relacionado con la EVAP, algo así como el control de emisiones evaporativas.
Un control muy sencillo
Se trata de un sistema que controla los flujos de gases en el depósito para que las emisiones que el combustible emite a la atmósfera, que son altamente contaminantes, no se liberen constantemente, algo que sí ocurría en todos los automóviles hace años.

Es importante tener cuidado al terminar de repostar
Hay que comprobarlo
De esta manera, cuando no está bien cerrado el problema es que se enciende uno de los testigos de avería del salpicadero, lo cual puede hacer pensar al conductor que ocurre algo grave, cuando es algo que se soluciona cerrando bien el depósito.

Este problema dispara el testigo de avería de motor
Para detectarlo debemos estar atentos para ver si el testigo se ha encendido justo después de repostar, en cuyo caso todo parece indicar que lo hemos cerrado mal o poco y está emitiendo gases a la atmósfera, un problema de cara a las emisiones contaminantes.

Lo principal es verificar que está bien cerrado el depósito de combustible
Para solucionarlo sólo tenemos que apagar el motor, bajar del coche y abrir el depósito de combustible y volverlo a cerrar con suavidad y verificando en este caso que la rosca está bien colocada y lo giramos hasta el final sin necesidad de forzarla.