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Cosas que pasanAlfonso Ussía

El mejor trabajo del mundo

El presidente del Gobierno no tiene que dar explicaciones a nadie, porque para eso es el presidente del Gobierno, manda narices, por no decir manda huevos, que hay que saber reprimirse en las expresiones

En el Boletín Anual de Chollos Remunerados, que se edita en Liechtenstein en 18 idiomas, y cuyo director no es otro que Gustav Morgensen-Hesse Taxis, antiguo Rector de la Universidad de Vaduz, héroe nacional del pequeño Principado por haber obtenido en los Juegos Olímpicos de Roma de 1960 un diploma –correspondiente al 5º puesto de la clasificación– en lanzamiento de petanca bajo las piernas, se registran los cincuenta trabajos mejor remunerados y menos exigentes del mundo. En segundo lugar de la clasificación figura El Defensor de los Derechos de la Mujer en Irán, y en el tercer puesto el Director Ejecutivo de la fábrica de cubitos de hielo «Laponien Ace» de Laponia, que en el año 2021 no superó las doce bolsitas de hielo que se comercializaron en 2020. En el número 48 aparece el maestro de Gramática español Práxedes Atocha Jiménez, profesor de Ortografía de Rosa Villacastín, Anabel Alonso y Xavi Hernández, que sigue liándose cuando escribe «césped» con una «t» final, es decir, «céspet». Pero el primer lugar lo ocupan los diputados y senadores del Congreso y el Senado de España, respectivamente, que durante el año 2021 disfrutaron de 52 días de vacaciones en Navidad, 18 en Semana Santa y 70 en verano. En total, 140 días de vacaciones remuneradas, sin contar las dietas, los viajes gratuitos, la tableta, el móvil de última generación y los vales de descuento en las salas de masaje para aliviar las molestias cervicales que padecen por la incomodidad de los escaños.

Sinceramente, creo que es motivo de orgullo por parte de todos los ciudadanos españoles.

No obstante, la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno de España ha convocado una rueda de prensa sin preguntas para dar a conocer a los medios informativos afines al poder ejecutivo, es decir, al 98 por ciento de los medios informativos que se mantienen gracias a las subvenciones, el desacuerdo de nuestro Gobierno con las vacaciones parlamentarias que se atribuyen a las dos Cámaras legislativas de España en el prestigioso boletín de Liechtenstein. El Gobierno discrepa, y su respuesta y denuncia de manipulación se aventuran contundentes. En concreto, el informe de Gustav Morgensen-Hesse Taxis exagera las vacaciones parlamentarias en Navidad y Semana Santa. En lo que respecta a los 70 días de descanso estival, nada que objetar. Pero según adelanta la Portavoz del Gobierno, los 18 días de Semana Santa son en realidad 16, y los 52 de Navidad, 47. Otra cosa es que el presidente del Gobierno se haya impuesto el sacrificio de descansar durante el año 2021, 12 días en Semana Santa, 41 en Navidad y 87 en verano, vacaciones que no pueden asumirse como parlamentarias. Sus vacaciones nada tienen que ver con el Congreso y el Senado, y como presidente del Gobierno que representa a un partido de trabajadores, no está obligado a informar de sus asuetos por motivos de seguridad. Ni de los suyos, ni de los familiares, ni de las amistades que se acoplan, ni de las amigas de las niñas, ni de las peluqueras y diplomadas en estética de su señora, ni de las mascotas, ni de los veterinarios de las mascotas, ni de los médicos y enfermeras que sanan los mordiscos de las mascotas a los invitados. El presidente del Gobierno no tiene que dar explicaciones a nadie, porque para eso es el presidente del Gobierno, manda narices, por no decir manda huevos, que hay que saber reprimirse en las expresiones.

De cualquier manera, aceptando los datos discordantes de la ministra portavoz, el primer puesto de chollos remunerados seguiría en manos del Congreso y el Senado de España. Pero me gusta que se puntualice, se matice y se haga pública la verdad. No son 140 días de vacaciones, sino 133. Que quede claro y diáfano, y sea rectificada al momento la calumnia.

Nos tienen envidia.