Gavilán y pichona
Madrugadas de insomnio en el suntuoso nido mientras emergen las inquietantes sombras del pasado
Un cincuentón de porte apolíneo, alto y bien preservado, se levanta para ir al baño a horas intempestivas de la madrugada. Al surcar la amplia y palaciega alcoba matrimonial repara en una sombra retrepada sobre un suntuoso butacón. Un sollozo femenino y quedo emana de la penumbra. El hombre se acerca y susurra solícito:
-Pero qué haces ahí, cariño. ¿Qué te pasa? ¿Estás llorando? ¿Qué ocurre?
-Qué va ocurrir, menuda pregunta chorras…
-Anda, vuelve a la cama. Últimamente estás nerviosa, fatigada, ni el bronceado de la India y de Brasil te tapa ya las ojeras. No puedes seguir así. Tienes que descansar.
-¿Cómo voy a descansar con la que tenemos encima? Esto se está poniendo chunguísimo, y lo sabes. Hasta a las nenas les dicen sus amigas en clase que se vayan «preparando para la mudanza». Y este no era el plan. Tú nos prometiste solemnemente que íbamos a vivir aquí al menos veinte años. Nos dijiste que lo tenías todo «atado y bien atado». Las niñas y yo ya nos hemos acostumbrados a esto. Y tú también, porque bien que te gusta salir a hacer mountain bike en plan campeón con tus escoltas, y la caravana de coches, y la comodidad del avión, y todo ese ejército de pelotas que tienes aquí montado… Y ahora, ¡a volver al piso de Pozuelo! A hacer la compra y pagar por la comida. Andar en taxis en vez de que te lleven estos escoltas tan majos…
-Te estás precipitando, pichona. En realidad todavía no ha pasado nada.
-Bueno, el tío se ha metido una rajada de miedo. Hasta te ha amenazado nada más salir del trullo. Tampoco sé si ha sido buena idea lo de decir que no lo conocíamos de nada cuando lo teníais hasta en la sopa. Lo de Rusia con Javi ya circula por todas partes, y a ti también te han pillado con el carrito del helado con la foto del mitin. Y se van a saber más cosas, es inevitable. ¿A qué andas? ¿No sabes controlar a la Guardia Civil y a la prensa? Eso de la UCO… Como decía Pujol: ¿Qué coño es la UCO? ¿No puede Fernando meter mano ahí para que no revuelvan con las grabaciones? Tú que lo controlas todo, ¿no puedes controlar eso?
-En ello andamos, cielo, pero no es tan fácil. No es como el TC, el CIS o la tele… Ahí funcionan como un ejército, hacen su trabajo y se resisten. Pero no hay que dramatizar. Fíjate lo de Paiporta, con el ataque aquel a mi persona y la actitud del Rey. ¿Qué ha pasado? Nada. Se decía que yo había quedado fatal, que me pasaría una enorme factura… y ya nadie se acuerda. Esto va muy rápido y nosotros trabajamos muy bien. El viernes y el sábado ya teníamos a la gente hablando más del jaleo que hemos montado con Broncano y Motos que de Aldama. A la gente se la maneja. Para eso tenemos las teles. La mayoría de la peña no se entera de nada, y lo de «que no venga la derecha» funciona de miedo. Este país es progresista.
-Ya, ya, pero si sale a flote eso de la pasta de José Luis en el extranjero. Todos sabíamos que era muy golfo y tenía montado un mogollón que ahora te puede llevar por delante.
-Tampoco. Diré que yo mismo lo había echado, que mi comportamiento ha sido ejemplar, que nadie está libre de que en su cesto haya una manzana podrida, pero que lo importante es apartarla. Tú no entiendes como funciona esto. En la práctica somos intocables. Aunque me pillasen atracando el Banco de España con una pistola en la mano, la mitad de la población me apoyaría, porque no quieren a la derecha. Han imputado al fiscal, a David, a José Luis, a ti… Pero al final, ¿qué ha pasado? Nada. La prueba es que aquí seguimos. Hasta tengo a Úrsula comiendo en mi mano y pasando del gallego. Ahora, también es verdad que podríais haber sido más prudentes. Lo tuyo de ir por el mundo en plan la nueva Warren Buffet sobraba, y lo del otro de tributar en Portugal y no ir ni a trabajar fue una gilipollez. Me dejé llevar por aquello de apoyar a la familia, cuando no tenía que haberos ayudado con vuestros chanchullos. Pero bueno, a lo hecho pecho. Y si os condenan, que tardarán años, podemos ir recurriendo y seguir con lo de la cacería de la ultraderecha. Además, al final siempre quedará Cándido, que puede hacer como con los ERE, borrón y cuenta nueva.
-Ay, ahora veo otra vez por qué me enamoré de ti. Nunca te rindes y además todo te da igual. Tienes ese don tan tuyo de decir una cosa y la contraria con la misma convicción. Has sido capaz de estar contra ETA y apoyarte en el partido de ETA, de aplicar el 155 a los indepes y acto seguido convertirlos en tus socios. Realmente eres un genio, vas sobrao. Ojalá tuviese yo esa facilidad tuya para men…
-No lo digas, que no suena bien, ni siquiera en privado. Vámonos a la cama. Y no te preocupes, cada día que pasa es otro día en el poder, y eso es lo único que importa. Buenas noches, Pichona.
(Fin del primer episodio: ¿Conservarán su nido de oro Gavilán y Pichona o acabarán en la jaula? Continuará...).