Cartas al director
Señor de gris sobre fondo rojo
Señor director:
A un simple ciudadano de a pie, como este humilde servidor que le escribe siempre, le ha llamado la atención las apreciaciones de los opinadores profesionales (tertulianos, periodistas, políticos, etc.) que a veces yerran por su excesiva cercanía con los protagonistas que les imposibilita ver las cosas con cierta perspectiva.
El problema de El Hundimiento de Casado no ha venido por los muchos errores cometidos por éste, desde los bandazos ideológicos hasta la pésima gestión del partido (más partido que nunca) o su elección del personal; para mí la puntilla fue cuando se rodeó para el Congreso de los Diputados de gente tan dispar (por disparatados) como toreros ¡y hasta el padre de la niña Mariluz! cuando hasta entonces al PP solo accedían personas contrastadas y altísimamente preparadas a diferencia del PSOE, donde las Valenciano, Pajín, Patxi López o Adriana Lastra hacían carrera (con perdón) sin haber abierto un libro en su vida… Su único acierto ha sido elegir a Almeida y sobre todo a Isabel Díaz Ayuso, que será el espejo en el que se deberían mirar en el PP, incluido Feijóo.
Pablo Casado era un buen chico, un tanto gris, que Mariano Rajoy lanzó de portavoz como neutralizador de Albert Rivera en el momento más álgido de éste con Ciudadanos (¿es que nadie lo recuerda ya?) hasta el punto de que la gente los confundía físicamente (de ahí el dejarse barba, otro detalle de la poca consistencia del pobre Casado) y que durante su labor con Rajoy solo fue eso mismo: un personaje gris, ni chicha ni limoná.
Cuando se empeñó en ser presidente y candidato del PP su gris candidatura se eligió por «compromiso» entre las de Soraya Sáenz de Santamaría y la de Cospedal y así llegó al poder del PP, de una forma gris. Cuando ha tenido que dar el cayo como líder de la oposición frente a un personaje tan letal, tan falto de valores, de moral y de escrúpulos como Pedro Sánchez su labor ha sido gris, muy gris ante un fondo tan, tan rojo como el que representan este gobierno sanchista-comunista. Un chollo para la izquierda. Por eso todo simpatizante de la derecha (desde Ciudadanos a Vox) le caló rápido y le vio como lo que ha sido y es: un hombre gris sobre un fondo rojo.