Los bancos hacen la vida más difícil a sus clientes

Ante tanto atropello, abuso e indefensión, mi más enérgica repulsa en las formas de actuación de los bancos para con los ciudadanos mayores y resto de personas.

¿Ha servido de forma concluyente la recogida de firmas del señor don Carlos San Juan en la plataforma Change.org para conseguir que se atendiera como es debido a ese colectivo de la tercera edad, de la digitalización financiera impuesta por estas entidades financieras?

Hace un par de meses necesité un certificado de mi cuenta bancaria. Cuál fue mi sorpresa que al pedirlo en mi oficina de la entidad en la cual he estado toda mi vida laboral y ahora la pensión de jubilación, me dicen que si me lo hacen ellos me cobran 15€ y, si lo hacía yo de forma digital, 2€. Es inaudito que incluso haciéndolo tú y siendo cliente durante tanto tiempo te cobren por la gestión. Al no quedar convencido de esta actuación, llamé por teléfono a la atención del cliente de esta entidad financiera haciendo la reclamación correspondiente y aparte otra reclamación escrita a la sucursal donde pertenezco. Pues bien, pasados unos días me llamaron por teléfono y me enviaron escritos comunicándome que todo lo que exponían era legal y consentido por el Banco de España.

Insólito, inhumano y demencial que las grandes empresas de servicios y bancos sigan empecinadas en ganar más, sacando los mismos beneficios que antaño, a expensas, como ha sido siempre, de los ciudadanos o proveedores, con el agravante de que ahora no dan los servicios mínimos y te cobran por todo, aunque lo haga personalmente el cliente de forma digital.

Todos los días, desde que uno abre los ojos, te encuentras que aparecen por doquier problemas que afectan a nuestra libertad y que impasibles lo aceptamos.

Las empresas financieras también coartan libertades.

Nos vemos cercados y ahogados por actuaciones injustas y que, de forma desesperante, nos arrodillamos y claudicamos ante las imposiciones y burocracias que provocan el desaliento y la retirada.