Cartas al director
La última mentira de Pedro Sánchez
Defender a las clases medias trabajadoras, es decir, pensionistas, trabajadores, emprendedores y empresarios autónomos, no es solo formularles falsas promesas ni de carácter populistas. Defenderlos es adoptar medidas realistas para impedir la subida exponencial de la inflación, impuesto brutal para las personas de mayor vulnerabilidad, es reducir los impuestos, es favorecer a las empresas para que se crean empleos de calidad. En este sentido, la última ocurrencia de Pedro Sánchez, de su segunda de a bordo, la señora Montero y de su gobierno de carácter radical y extremista, de crear un impuesto a la banca, choca frontalmente con esa defensa y va en contra del interés general, porque, señor Sánchez, es pan para hoy y mucha hambruna para el futuro inmediato. España, señor Sánchez, forma parte de la Unión Europea, aunque a usted le pese y es decir lo mismo que somos parte de un único espacio económico comunitario basado en las reglas básicas de la economía de mercado que impiden un intervencionismo comunista al que usted ha llevado a este país, traicionando a los principios progresistas de la socialdemocracia y del propio PSOE. Las mentiras tienen las patas muy cortas. Usted me recuerda los últimos momentos del ex socialista, fundador del fascismo, Benito Mussolini, en su República Social, muy bien recreado por el cineasta Pier Paolo Pasolini, en Saló o los 120 días de Sodoma. Igual, usted, carece de cultura cinematográfica y si así es, le recomendaría que la viera. Los españoles no nos merecemos comernos su m... de política económica, señor Sánchez. Así de claro.