Engañar para qué

Engañar a España con las leyes también es malversar. Se nos está robando la convivencia, intentando justificar el delito con lo más «moderno europeo» falsean la realidad con palabras de la ministra del Ejercito, para distinguir «al corrupto que se lo lleva a su bolsillo del corrupto que no». Es decir, del corrupto que organiza al «autocorrupto». Y así por unos milloncitos europeos o de los parados que se distraen, ya no será necesario pedir el indulto para nadie. Engañar y robar ya no será delito.

Hasta para esto el «doctor» Sánchez es original porque nunca deja de sorprender, para eliminar el delito. La sorpresa más grande será para los suyos, que tanta pancarta han paseado para condenar a los corruptos de enfrente. Y el socialismo, ¿aún finge que la malversación le indigna? se tendrán que tragar los sapos cuando vayan a votar. A ver qué razones pondrán en la pancarta. ¡El Gobierno de unos pocos!

Diseñar leyes solo para unos pocos españoles, justo los que no quieren serlo y de paso de violadores. España legislada por diez «familias» de minorías con sillas. El Gobierno de unos pocos tiene su precio, todo el mundo lo tiene, salvo el presidente que depende del precio de sus socios mafiosos de las «familias». Que exigen cobrarlo.

El «doctor» Sánchez es el nuevo predicador de la buena convivencia, lo bueno es lo que él dice y hace, es el garante de la sociedad. Ha sido llamado para cambiar el significado de la violencia y el robo. Para eso ha montado la gestoría del sanchismo, como centro neurálgico de un sistema de tribus o bandas de dentro y de fuera. Gestora de todas las ventanillas y bedel con todas las llaves para armonizar las virguerías de la legislación.

Dominar, la ley a la ley, y a la ley, que soy yo. Para ganar y ganar y volver a ganar, y ganar a la sociedad la convivencia, la libertad y la democracia…