Cartas al director
Miente Bolaños
En una reciente columna difundida por el Twitter del PSOE, el ministro Bolaños dice que las mayorías reforzadas fueron pensadas para facilitar el diálogo y el consenso. Termina diciendo que el actual partido de la posición no apoyó la Constitución cuando fue aprobada en 1978. Pues bien, todo el mundo sabe que el personalísimo acto de votar es un acto opuesto al acto de dialogar. El día de las elecciones los españoles acudimos a los colegios electorales a votar. Y votamos, además, en secreto, pues el secreto de la cabina nos garantiza que nadie intente «dialogar» o «consensuar» con nosotros. En las Cortes Generales sucede igual. Miente Bolaños cuando dice que las votaciones reforzadas fueron pensadas para dialogar. Todo lo contrario. Es más, su fundamento es impedir golpes constitucionales. Que las Cortes lleven años sin votar a los candidatos (ya propuestos) al Consejo General del Poder Judicial –CGPJ–, es algo de lo que habrán de responder las Cortes Generales, en concreto sus respectivos presidentes. Y en cuanto a que el partido de Feijóo no apoyó la Constitución, miente también Bolaños. En 1978, aparte de que el Partido Popular no existía, los actuales líderes de la oposición, bien no habían nacido, bien eran niños o bebés, sin capacidad de ejercer el voto. Y la Alianza Popular de Manuel Fraga, cuyo centenario está siendo silenciado, pidió el voto favorable a la Constitución. Miente, pues, Bolaños. Por cierto, los acuerdos que sobre el CGPJ dice Bolaños firmó con el Partido Popular de Pablo Casado son inexistentes desde todo punto de vista. Todo el mundo sabe que Bolaños, que ni tan siquiera es diputado en la actual legislatura, carece de atribuciones para acordar nada sobre los nombramientos del CGPJ. Insisto, miente Bolaños.