Jaque mate al Gobierno de extrema izquierda

Echar a este Gobierno de extrema izquierda es indispensable para detener el deterioro democrático de España. Si los sondeos se cumplen, pronto se pondrá fin a la deriva totalitaria y a las políticas extravagantes. Es intolerable que la porquería se haya convertido en el tema central del discurso político como argumento para acaparar votos. Sabemos que ningún partido es inmune a la corrupción. A unos le salen mas garbanzos negros que a otros, pero nadie puede sacar pecho. Lo verdaderamente trascendente es la contundencia ética de la respuesta. Y ahora, cuando los diarios llenan sus páginas con el caso Mediador, el partido socialista en lugar de dar explicaciones, se defiende intentando solapar la corrupción del Tito Berni hablando de Rajoy. ¡Viva la transparencia! Es alucinante.

Los dirigentes socialistas confunden interesadamente las responsabilidades políticas con las responsabilidades legales. Ya lo vimos en el caso de los ERE. María J. Montero, siendo consejera en Andalucía, sostuvo cuando fue imputada Magdalena Álvarez, que la imputación no es motivo de dimisión, que había que esperar al final de la causa. Y esta dirigente locuaz, ahora ministra de Hacienda, acaba de repetir lo mismo sobre el caso Mediador. Estas afirmaciones, que apestan a hipocresía, ponen en tela de juicio su grado de compromiso en la lucha contra la corrupción y echan por tierra su pretendida integridad ética. Porque una cosa es la responsabilidad penal, a la que hace referencia la ministra, y otra es la responsabilidad política, que es juzgada por los ciudadanos. Y los ciudadanos, que no admiten subterfugios, condenan la corrupción, su postureo y su demagogia.