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Cartas al director

La casa de los horrores

En plena Semana Santa cuando presenciamos las imágenes que representan la pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo, si como de una película de terror se tratara, nos enteramos de los hechos ocurridos en la localidad de Colmenar Viejo, Madrid, en el seno de una familia con ocho hijos, él médico de profesión y que ha maltratado durante años a todos sus familiares. Ahora cuando ha saltado la noticia salen a la luz testimonios de vecinos manifestando que a veces los castigaban encerrándolos en el garaje y se escuchaban los llantos durante horas, otras fuentes cercanas al caso informan que azotaba a los pequeños con un cinturón y una vara de bambú. Cuando la Guardia Civil irrumpió en lo que se ha llamado «la casa de los horrores» se encontró con los ocho menores hacinados en literas en un cuarto del chalet familiar, y una situación de suciedad e insalubridad insoportable en el resto de la casa. ¿Cómo puede llegar a ocurrir esto ? ¿ Y durante años los conocidos lo han ignorado? Vivían allí desde hace unos 13 años y desde el principio su comportamiento provocó la preocupación de sus vecinos. «Desde siempre han tenido todas las persianas bajadas, nunca las he visto subidas. Aunque tenemos piscina, los primeros diez años los niños no la pisaron». Pocos sabían entonces que de puertas para adentro la situación era, presuntamente, mucho más alarmante. Nadie se podía imaginar algo tan grave en la casa de un médico que trabajaba en un conocido hospital madrileño. En una ocasión, una vecina pasó una hora consolando a uno de los menores de seis años mientras permanecía castigado en la terraza, expulsado de la casa. ¿Pero cómo nadie se atrevió a denunciarlo a las autoridades? Ahora todos dicen que no creían que fuera una familia normal, había cosas muy raras, pero el silencio ocultó estos hechos hasta ahora. La Comunidad de Madrid se ha hecho cargo de los 8 niños, todos menores de edad, y los han sacado de sufrir esta situación tan denigrante, pero lo que no entiendo es cómo el juez ha dejado a los padres en libertad con cargos. Los tenía que haber enviado a la cárcel de inmediato. ¿Quién se pone ahora en manos de este médico, como enfermo, después de conocer algunas de las cosas que ha hecho a sus propios hijos?