Cartas al director
Lo que las encuestas no dicen
Estamos en el año de las encuestas, vísperas de dos procesos electorales que, en el fondo, son uno solo. Como la Historia tiende a repetir los eventos con distintos personajes, en este momento, unas elecciones que se califican como «de autonomías y municipales» en realidad, no son tales. La cruda realidad es que se han constituido de facto como la primera vuelta electoral de las generales que tienen que venir a continuación, ya sea en diciembre o, incluso, antes. Porque, de lo que se trata es de evaluar la gestión del gobierno social comunista de Pedro Sánchez, no si de un presidente de un gobierno autonómico o de un alcalde de cualquiera de los municipios de España. Es tan lamentable como las fraudulentas elecciones «municipales» del 12 de febrero del 31, preludio de un golpe de Estado ilegal contra la Monarquía y que propició el cambio de régimen dos días después. En España, y por la idiosincrasia de los españoles, suele ser habitual este tipo de situaciones políticas. Sin embargo, a fuer de estar a la altura de las circunstancias, habrá que responder al envite o, dicho de un modo más claro, la alternativa es o Pedro Sánchez o en contra de lo que representa. En este sentido, las encuestas eluden obviamente el auténtico escenario que se oculta, creo que deliberadamente por todos los partidos. Personalmente, sin caer en el engaño, mi decisión está muy clara. Si ha habido un Gobierno nefasto en mi país desde 1977, ese es sin duda alguna, el actual. España necesita un cambio radical y urgente.