Cartas al director
23 de julio, elecciones generales
Los acontecimientos se han precipitado de una forma vertiginosa. Particularmente, sospechaba que el señor Sánchez intuía que las elecciones municipales y autonómicas de este 28 de mayo no le serían favorables; por tanto, no me ha extrañado en absoluto la convocatoria de elecciones generales para el día 23 del próximo mes de julio.
Mis recelos se basan, primero, en que en los casi siete meses que quedan o quedaban para las generales, serían meses que correrían en su contra; su Gobierno de coalición haciendo agua por todas partes, y la oposición –las derechas– cada vez más fuerte y posiblemente más unida, y a todo esto, el señor Sánchez, inmerso en la presidencia de la Comunidad Europea.
En segundo lugar, el celebrar el 23 de julio las elecciones no deja de guardar en el fondo, las intensiones del ventajista empedernido que es el señor Sánchez, este señor, no da nunca, puntadas sin hilo. La fecha es de lo más idónea para una posible obtención, por encontrarse gran parte de los españoles, en plenas vacaciones del verano, y además, fecha inmersa en un puente muy apetecible. ¿Cuánto tardó en pensar esta fecha señor Sánchez?
Parece ser que se fuerza a muchos votantes a ejercer su derecho a votar a través de correos. ¡Qué sospechoso! Me viene a la mente, Melilla y Mojácar.