Una Selectividad única

La prueba de acceso a la Universidad, conocida popularmente como Selectividad, presenta en nuestro país tanta variedad como regiones conforman nuestro territorio nacional. En cambio, el distrito universitario es único, lo cual significa que cualquier alumno independientemente de la comunidad autónoma en la que realizase la prueba podrá con su nota optar a cualquier universidad española. ¿Es justo? Si partimos de las evidentes diferencias y complejidades constatadas en las pruebas realizadas, según el lugar, la equidad brilla por su ausencia. Máxime es la injusticia cuando sólo aquellos estudiantes con mejores calificaciones obtendrán las plazas universitarias más codiciadas. La descentralización de la educación y la posterior transferencia de las competencias a las comunidades choca frontalmente con la existencia de un único distrito universitario. ¿No debiera ser esta prueba selectiva de acceso a la Universidad española como el MIR, en la misma fecha e idéntica en todo el Estado para mitigar las desigualdades que ya originan tantos sistemas educativos existentes?