Pablo Motos, ¿periodista?

Desconozco lo que ha podido conseguir Pedro Sánchez con la entrevista realizada en El Hormiguero, lo que sí tengo claro es que el Director del programa, Pablo Motos, ha conseguido reducir el arte del periodismo a una farsa intragable.

Para escuchar un monólogo no eran necesarias semejantes alforjas, incluso Sánchez se vio crecido hasta tal punto de que, en ocasiones, dejaba el papel de entrevistado para pasar a ser el entrevistador teniendo como respuestas algún que otro balbuceo incomprensible de Pablo Motos.

¿Cómo alguien del cual se suponía era poseedor de tablas suficientes puede permitir que Sánchez traduzca las «mentiras» por simples «rectificaciones» y ni se inmute, cual invitado de piedra? ¿Acaso el victimismo en que se instaló Sánchez denunciando a varios medios de comunicación, El Hormiguero incluido, no habría dado lugar a un sinfín de réplicas? ¿Dónde quedó la hábil ironía que este presentador poseía cuando el presidente se salía por las ramas al responder las pocas preguntas que consiguió hacerle?

Sigo creyendo en la honradez, objetividad y libertad del buen periodista y este hombre, Pablo Motos, debería de dar alguna explicación por el hecho de aceptar someterse a semejante ninguneo, en caso contrario todavía existen medios en los que los programas «basura» aún son bien acogidos y probablemente sean del gusto de Sánchez pues el contenido de los mismos es tan insustancial que en modo alguno podría hablarse de víctima alguna, ni tampoco de verdugos, claro, al pueblo pan y circo.