En política, las comparaciones no son odiosas

Comparar a un secretario general del Partido Socialista Obrero Español, presidente en cuatro legislaturas del Gobierno de España, además de un caballero que, cuando no fue el más votado en unas elecciones, no presento su candidatura a la presidencia, aun sabiendo que posiblemente con pactos, lo lograría.

Don Felipe González Márquez demostró ser un Señor.

Claro que debemos compararle con el secretario general del partido «sanchista», Pedro Sánchez, personaje destructor de aquellas dignas e históricas siglas PSOE; desgraciadamente presidente del Gobierno en dos ocasiones, gracias a sus cesiones políticas y económicas a grupos independentistas, y partidos de origen terrorista, los cuales no tienen otro objetivo que destruir a España como nación.

En las últimas elecciones generales, convocadas en periodo vacacional del pueblo español, perdió y no fue la fuerza mas votada. El personaje está buscando por las alcantarillas, a las más repugnantes ratas políticas para, aun perdiendo, presentar su candidatura a la próxima presidencia del gobierno de España.

«Corleone» no se siente menospreciado por nada ni por nadie, ya que, padece «mitomanía» y como jabalí herido, muere matando.

Pero el pueblo español no es tonto y claro que menosprecia a unos y no a otros. En política, las comparaciones no son odiosas,

Por hoy, hasta aquí voy a escribir…