Cartas al director
Lo que no se evalúa, se devalúa
Un profesor gustaba de repetir en clase: «Lo que no se evalúa, se devalúa». Y señalaba que el fracaso de la enseñanza se debe, en gran parte y según su opinión, a la falta de evaluación seria de las decisiones tomadas y actividades realizadas.
Muchas campañas de prevención son un fracaso reincidente porque no se hace una evaluación veraz de sus resultados. Durante años se repiten las mismas campañas con los mismos prejuicios ideológicos y los mismos fracasos en resultados: acoso escolar, embarazos en adolescentes, alcoholismo, violencia juvenil, drogas, accidentes de tráfico, igualdad, violencia de género…
Es necesario hacer campañas de prevención, pero son un fracaso tal y como se diseñan y ejecutan, y sorprende que nadie evalúe los resultados, igual que sorprende que haya personas que viven de los fracasos reincidentes de las campañas de prevención. Lo malo es que lo hacen con cargo a los presupuestos que pagamos entre todos.
¿Propuesta de mejora? Tres pasos:
- Uno: realizar una evaluación seria, veraz, independiente.
- Dos: suprimir todas las campañas que acumulan fracasos.
- Tres: organizar las campañas con carácter profesional, sin carga ideológica, y con evaluación permanente.
De este modo, las campañas de prevención podrán tener éxito.