Por lo nuestro

La lógica política requeriría del relevo de Feijóo en la secretaría del PP. Cuatro años más a vueltas con el sanchismo es mucha tela. Pero su correcta intervención en la investidura que no le proclamó, visibilizó ciertas maneras que impulsaron a la militancia. Solo a la militancia, porque quienes nos alejamos de ella hemos seguido observando un PP echado al monte, que sigue anclado a Vox y al que pretende minimizar rebasándole por la derecha. No hay mal que por bien no venga, si el PP consigue reducirla, aunque es peligroso que lo logre a base de ser más papista que el Papa. Creo, sin embargo, que la razón última de adherir a Feijóo a Génova es porque la tremenda inestabilidad del nuevo Gobierno abre la esperanza a una repetición electoral. No en vano. La Ley de Amnistía será todo lo legítima que se quiera, pero sostener el nacionalismo radical catalán en declive se me antoja un grave error. No ya solo político, sino también social. Creo que tal maniobra no mejorará la estabilidad en Cataluña. Son muchos los catalanes que consideran que se le han dado alas gratis al siniestro y decadente Puigdemont. Pero es que, además, se están dando del mismo modo alas al nacionalismo español, y, lo que es peor, se está provocando una gran polarización social. Una vez más, nuestros mediocres e interesados políticos de aquí y de allá se encargan de desestabilizar, crispar y dividir, cuando lo que España necesita es unidad y confianza. Necesitamos, no partidos más fuertes, necesitamos hacer país. Precisamos que los ciudadanos podamos empezar a luchar por lo nuestro, además de cada uno por lo de cada cual.