Cartas al director
Hay esperanza... libros
Cuál ha sido mi alegría al ver una nueva librería en mi barrio. Sí, hablo en serio; no es broma. Acaban de estrenar una nueva actividad económica que, como diría un economista, viene a cubrir una necesidad del mercado. Y nunca mejor dicho. Si algo necesitamos en estos tiempos las personas, y especialmente los jóvenes, son libros.
Lo que más me ha gustado de la tienda son dos cosas: la primera, las obras que ofrecen son de gran nivel literario, importancia histórica y de gran carácter formativo–de hecho, adquirí un libro de F. Hayek y encargué otro–; y, por otro lado, la profesionalidad de su personal –servicial y alegre–. Es decir, tienen los dos ingredientes para triunfar como emprendedores: excelente producto y magnífico trato.
En estos tiempos de teléfonos inteligentes, aplicaciones informáticas, videojuegos, inteligencia artificial; en resumen, donde todo se fabrica o desarrolla para que el ser humano no piense, no reflexione y sea cada vez menos humano, la vuelta a la lectura histórica, de pensamiento clásico y fundamentos del conocimiento, abre una puerta a la esperanza.