¡Estupefecto!

Estupefacto. Así me he quedado tras ver las imágenes de los reporteros de El Debate al ser expulsados de la Universidad Complutense. La profesora que los echa argumenta que «no es por ellos, sino por el medio», esto es, por pertenecer a El Debate. Según este singular argumento la propia profesora no podría ejercer la docencia en las universidades que no estuvieran de acuerdo con su ideología. ¡Fantástica enseñanza! Y los sumisos asistentes a coro gritando «fuera fascistas de la universidad», anulando cualquier posibilidad de diálogo.

Soy licenciado en CC. Políticas y Sociología, pero no pude disfrutar del contacto personal con alumnos y profesores por estudiar a distancia. Pero sí pude hacerlo en el doctorado, y resultó una experiencia enriquecedora el poder dialogar y establecer puntos de vista diferentes incluso con los profesores, más aún, con el tribunal del doctorado. Al parecer la profesora Díez no está por esta labor, lo siento por ella, no podrá jamás contrastar la veracidad de sus ideas.

Se ha hablado de los problemas de la universidad española, poca subvención, alejada de las necesidades de empresas, poca preparación de los que acceden etc., pero el problema más grave es el que aparece en el vídeo en una facultad de humanidades, el pensamiento único (¿Quién se atreve a llevar la contraria al profesor?), la dictadura ideológica. Con estos profesores no avanzaremos.

¿Qué ha hecho El Debate y sus profesionales para que se les impida informar?

Visto esto, me alegro de haber estudiado en la UNED, a pesar de las limitaciones, es una universidad seria entre otras cosas porque el programa se da completo.