Cartas al director
El procesamiento y el pensamiento binario
Siempre ha existido el bien y el mal, Dios y el demonio. Son frecuentes las películas de buenos y malos. Con frecuencia alguna persona te dice, aclárate, «sí o no».
Tendemos a ver dos, y no más. Nos va el dualismo!. Percibimos elementos que se oponen: Blanco, negro. Alto, bajo.. Dentro, fuera. Subir, bajar. Entrar, salir. (...). Las relaciones personales: acción, reacción. Estímulo, respuesta.. La historia: tesis, y antítesis. La salud: antígenos y anticuerpos.
Cuando te dicen: «No te enrolles, las cosas claras», te están llevando al pensamiento y al discurso binario, es decir, a la sencillez del dualismo. ¡Dos!. Cuando intentas comprender la realidad, ves que la manera más fácil de comprenderla, es reduciéndola a un conjunto de pares.
Resumiendo: no abandonamos el binarismo, para comprender, para que nos comprendan y por otras razones.
Seguimos teniendo un lenguaje, un pensamiento y un discurso binario, porque, así todo es más fácil. A pesar de que estamos superando algunos binarismos. «Hombre, mujer. Cuerpo, mente». Dos ejemplos.